LA noche de San Juan es una de las más mágicas del año. Las hogueras, la llegada del solsticio de verano o la costumbre de escribir deseos en un papel y quemarlo en las fogatas de la playa forman parte de la liturgia popular. Sin embargo, este año el artista bilbaino Germán de los Ríos ha querido ir más allá de estas tradiciones y ha fusionado el arte con las costumbres de esta tradición cristiana de orígenes paganos. En concreto ha creado una escultura en el jardín del restaurante Gardoki de Sopela que arderá coincidiendo hoy con la noche más corta del año.

“La noche de San Juan es diferente al resto. Todos tenemos buenos recuerdos de la infancia y por eso quería crear una obra en la que los niños pudiesen participar y en la que se sientan parte del día, además de fomentar la creatividad entre los jóvenes”, explica De los Ríos, que ha planteado la obra con la colaboración con otros 17 artistas y en la que también han participado niños pintando alguna de las partes de la misma. “He trabajado en esta obra cerca de un mes y, durante ese tiempo, los niños que acudían al restaurante han ido pintando algunas partes”, señala.

En este sentido, la obra, titulada Akelarre es una fusión de trabajos artísticos de temática libre realizada sobre madera y mide 3,5 metros de altura. En su conjunto está formada por seis cubos de los cuales cinco están en el aire sujetos por ramas de árboles. “Simulan un akelarre como si estuvieran danzando al son de la música alrededor del fuego”, apunta el artista. También es un cubo “desordenado” que tiene “un centro en común: el arte”, añade. Así, hoy por la noche la escultura arderá y todo el trabajo artístico se convertirá en pasto de las llamas. Alrededor de ella, en vez de brujas preparando un ritual mágico se darán cita artistas y niños repletos de grandes dosis de creatividad que verán culminado el sueño de un proyecto artístico, el de Germán de los Ríos, cuya intención es que se mantenga en el tiempo y, por qué no, acabe convirtiéndose en un tradición más de la noche de San Juan. “Este proyecto lo intentaremos repetir el año que viene con la colaboración de algún ayuntamiento”, expone.

Autodidacta Germán de los Ríos (Bilbao 1974) es un artista autodidacta cuya obra está marcada por la propia investigación y su trayectoria personal, en la que ha “intentado siempre envolver y sorprender al público que presencia sus trabajos, con una escultura que se fusiona tanto con la naturaleza como con lo urbano, la cual no deja indiferente al espectador, invitándole a percibir nuevas sensaciones visuales”, le describen.

“Al margen de sus gustos estéticos o artísticos, arte joven, nuevas formas para un mundo cambiante”, reza en su carta de presentación. En concreto, en su serie artística Ocupación del pensamiento en el espacio trata de transmitir el mensaje de la propia “fuerza interior”. “El movimiento que transmiten las formas superiores elevándose en el aire y uniéndose entre ellas nos causa un gran asombro, formas geométricas materiales pesados desafiando las leyes de la gravedad”, expone. Desde su taller de Bolueta ha creado numerosas esculturas de gran formato, un soporte que le motiva y da rienda suelta a su creatividad. Entre sus obras más destacadas está el tenedor de La Arboleda, titulada Hambre (Nos comemos la Tierra y nos morimos de hambre), de siete metros de altura realizada con piedra y acero.