Trapagaran - Desde su más tierna infancia Gorka Hoyos Larrucea soñó con vivir una aventura viajera alrededor del mundo y, sobre todo, a lomos de una bicicleta. Apasionado de las lecturas de viajes, Hoyos recuerda como en su etapa escolar en el colegio público La Escontrilla elegía libros de viajes para hacer los trabajos que le pedían en clase. Ahora con 39 años, que estirará hasta el próximo julio, este trapagarandarra que reside en el histórico poblado minero de La Arboleda, está a punto de poner a cero el cuentakilómetros de aquel reto infantil que le llevará desde Anchorage, en el estado norteamericano de Alaska, hasta Ushuaia, en la Patagonia argentina.
“Llevo tiempo queriendo llevar adelante este viaje y ahora es el momento adecuado”, señala este albañil de profesión que hace varios meses avisó a la empresa con la que trabaja habitualmente sobre un reto personal que le mantendrá en movimiento al otro lado del Atlántico más de 18 meses. “No me he marcado una ruta tan concreta como para poder avanzar cuándo regresaré exactamente, aunque he calculado que puede ser entre 18 y veinte meses los que tarde en llegar Ushuaia desde Alaska”, apunta este ciclista avezado que ya ha hecho rutas como la que une el Atlántico y el Mediterráneo -casi 800 kilómetros al lado del Canal de Garona y del Canal du Midi- en Francia y varias veces el camino a Santiago de Compostela sobre la bicicleta. “Suelo hacerlo en unas siete u ocho etapas saliendo desde mi casa en La Arboleda”, puntualiza este deportista que tiene previsto recorrer unos 45.000 kilómetros en su periplo americano.
Hoyos coge hoy en Loiu un avión que le trasladará hasta la ciudad alemana de Fráncfort donde enlazará con un vuelo directo hasta Alaska para iniciar -previsiblemente mañana- su particular Panamericana, ya que es él quien financia íntegramente la expedición para la que cuanta con cerca de 9.000 euros que ha ahorrado con esmero para cumplir su objetivo.
“Hablé con la empresa a ver si se animaban a colaborar, pero me fueron dando largas y tampoco me había planteado realizar un proyecto para presentarlo a empresas o entidades de la zona. Las experiencias que he leído en Internet sobre esta ruta hablan de que puede hacerse con unos 30 euros al día. Espero que sea suficiente”. No obstante Gorka Hoyos no está del todo solo, ya que algunos amigos residentes en el vecino barrio de La Reineta propondrán a la Asociación de Vecinos hacer alguna donación económica a este viajero que llevará el nombre de Meatzaldea y de Trapagaran por todo el continente americano.
“Ya me han pedido que les pase el número de cuenta que he abierto en la plataforma Pay-pal (WSP7BB2ADW23C) por si alguien quiere apoyarme económicamente”, señala Gorka, quien lleva varios meses cotejando varias páginas de aventureros viajeros como Álvaro Neil Biciclown. “Casi me dan más miedo las autoridades de emigración de Estados Unidos y Canadá que la gente que vaya a encontrarme en el camino, aunque nunca se está a salvo de imprevistos”, apunta este ciclista que aprendió de muy joven los secretos de la bici a través de su padre, Juan Cruz, “que siempre ha sido muy manitas y a mí también se me da bien”.
A buen seguro que le vendrán estupendamente esos conocimientos para lidiar un viaje que llevará a cabo a bordo de un bicicleta que pesa unos doce kilogramos a los que se suman los siete de las cuatro alforjas en las que porta desde la tienda de campaña hasta material para cocinar, pasando por ropa y calzado, botiquín y las herramientas necesarias para solventar las averías de la bicicleta.
“Unos dicen que estoy loco por irme así, pero la mayoría de la gente que me conoce sabe que si no lo hacía ahora que no tengo ataduras luego, con familia y tal, iba a ser imposible”, remarca este viajero de Trapagaran que tendrá que atravesar quince países del continente americano. Un viaje que Gorka Hoyos plasmará de manera continuada a través del blogspot Bizi Aventura. “Es una forma de narrar este viaje y compartirlo con los amigos y la gente a la que le gusten las aventuras”, propone.