Berango - “Si no te curas de amor, te curarás de risa: #ponunaenfermeraentuvida”. Con este sugerente reclamo Erika Ramos (Berango, 1983) invita a todo el mundo a disfrutar de su primera novela, Donde mis pies me lleven, una historia de amor y, sobre todo, mucho desamor, repleta de humor. Enfermera de profesión desde 2004, el ambiente hospitalario ha sido su fuente inspiración aunque con matices. “Los hospitales no son como Anatomía de Grey. Hay mucho trabajo y poco personal”, señala. No obstante, dos de sus compañeras le han dado pie a la trama del libro. “Siempre tenemos conversaciones en nuestra línea que he adaptado”, apunta. Incluso, la escena final, llegó durante una guardia. “Fue un momento de inspiración. Cuando escribí la palabra final lo primero que hice fue mandar una foto a mi editor”, recuerda.
Erika empezó a escribir sus primeras palabras en la vieja Olivetti de su madre y con la eclosión de las redes sociales creó diferentes blogs donde contó sus vivencias y experiencias. “Siempre he sido de escribir diarios. Con el auge de las redes sociales empecé con un blog donde ofrecía mis reflexiones. Me leía poca gente, pero los que lo hacían eran fieles”, indica. Así, a finales de 2016, Plan B (Penguin Random House) se puso en contacto con ella y mostró interés en publicar un libro que verá la luz el próximo 8 de marzo con 3.000 ejemplares a la venta. “Para alguien como yo, impaciente por naturaleza y que va a cien mil por hora, el proceso de edición se está haciendo muy largo”, bromea mientras contempla unos originales marcapáginas creados a su imagen y semejanza.
La portada también es muy representativa. Es una enfermera con un moño, unas gafas y una especie de garabato alrededor de ella. “Sí, porque soy una garabato mental”, acierta a explicar.
Inspirada en su ambiente laboral, la novela describe a Gabriela, una joven enfermera de 32 años que ama su profesión. “Empatiza mucho con los pacientes”, sostiene Erika. Pero, mientras que en su trabajo se comporta con cierta estabilidad, en su interior vive en una montaña rusa de emociones. Esa es la dualidad de Gabriela: el trabajo y los sentimientos extremos. “Es un desastre en su vida emocional. Le hacen caso treinta segundos y se enamora”, apunta Erika. “Tengo un imán para garrulos”, es otra de las máximas que componen la personalidad de la protagonista. “Se podría resumir en que es una historia de príncipes azules y príncipes desteñidos”, sostiene. Tiene claro que su target preferencial son mujeres “de entre 25 y 35 años” pero anima también al género masculino. “Si algún chico lo quiere leer para entender qué es lo que pasa por la cabeza de una mujer cuando piensa en su príncipe azul...”, desvela al tiempo que afirma con rotundidad: “Las mujeres solo quieren que las quieran bien”. Al igual que refleja su personaje. “Quiero enamorarme, pero de verdad como nunca, como nadie”.
Preventa Con la fecha del 8 de marzo marcado en rojo en el calendario como punto de partida de su aventura como escritora, actualmente Erika se encuentra inmersa en una vorágine editorial. “Próximamente haremos una presentación del libro, que ya se puede reservar en Elkar, La casa del libro y El Corte Inglés. También a través de Amazon”, detalla. Erika está a punto de ver cumplido un sueño del que quiere disfrutar sin mayores pretensiones. “No espero nada a nivel de ventas. Publicar es dificilísimo y solo con tenerlo en la estantería de mi casa es suficiente”, señala.
Paralelamente, compatibiliza la publicación de su primera novela con el estudio, puesto que está preparándose para una próxima convocatoria de empleo público. “La primera vez que me presenté fue en 2006. Esta será mi quinta OPE”, indica.