Un sueño que no cesa en seis letras
AQUEL 29 de noviembre de 1980, a las puertas de la Universidad de Oñati, una lengua se puso en marcha. Comenzaba entonces un sueño que no cesa: el euskera lanzado hacia la toma de la calle. Entre los relevistas que tomaron parte en esta primera edición se encontraban el antropólogo José Miguel de Barandiarán, en aquel entonces ya con 90 años de edad, políticos como Telesforo Monzón y Francisco Letamendia o el alcalde de Bilbao, Jon Castañares, entre otros. Desde entonces hasta hoy la Korrika ha recorrido miles de kilómetros. En torno a otros dos mil en once etapas, desde Otxandio hasta Iruñea, recorrerán los participantes en la presente edición, la vigésima, que ayer se presentó en sociedad en la sala BBK de la Gran Vía bajo el lema BatZuk, un juego de palabras que invita a la ciudadanía a acercarse al euskera y “a la fiesta por la igualdad de las lenguas y sus hablantes”. Los fundadores de aquella primera edición serán homenajeados tanto tiempo después.
Abanderaron esta puesta de largo, ilustrada con Zirkorrika, la canción de la presente edición, compuesta por Xabier Zabala con letra de Uxue Alberdi, y a la que ponen voz, entre otras, Oihana Fernández, Jurgi Ekiza, Miren Narbaiza y Petti, la coordinadora de AEK, Mertxe Mujika y Asier Amondo, responsable de Korrika 20. Las seis letras de BatZuk fueron iluminándose mientras seis estudiantes euskaldunes fueron expresando sus sentimientos sobre el euskera en distintas lenguas mientras las letras se iluminaban. Y con aquella luz uno creyó intuir una antorcha contra las tinieblas.
La cita congregó a numerosa gente comprometida con esta idea, desde el consejero Bingen Zupiria, al alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, pasando por Ana Otaudi, Lorea Bilbao, Inés Ibáñez de Maeztu, José María Argoitia, en nombre del Athletic; Arkaitz Martínez San Vicente, Bittor Madariaga, Ana de Castro, Miren Dobaran, Estibaliz Alkorta, Igone Martínez de Leza, Adolfo Arejita, embajador plenipotenciario de Euskaltzaindia y Labayru, Jokin Aduriz; el presidente del EBB, Andoni Ortuzar, la presidenta del BBB, Itxaso Atutxa, Mikel Aiestaran, Ainhoa Zabala, Edurne Eizagirre, Lander Iturriaga y un buen número de practicantes impenitentes de la lengua de Aitor para poder vivir, de esa manera, la diversidad cultural universal.
Fue un encuentro alegre, festivo casi. Al mismo se sumaron Arantza Urkaregi, Pili Robles, Josu Unanue, Txusa Padrones , Garikoitz Beltrán, Daniel Arriaga, Martxelo Otamendi, Edurne Zabaleta y así todo un cónclave euskaldun que a partir del 30 de marzo saldrán al camino para reclamar más uso, más presencia del euskera en la calle como un sumando más en la gran aritmética de las culturas. “Diga usted que más que una lengua, el euskera es un estilo de vida”, chistó una voz a mi espalda. ¿Acaso el idioma de cada cual no lo es...?