Bilbao - “La escuela celebrará su centenario el próximo año. ¿Qué mejor regalo de cumpleaños que recuperar el nombre de origen?”. Lo dice uno de los padres del colegio Félix Serrano de Bilbao que están promoviendo que el centro vuelva a llamarse Escuelas de Indautxu, en vez de con el nombre de un docente “afín al régimen que jamás ejerció” en dicho centro.

La propuesta, planteada en el último consejo escolar celebrado en el centro, será sometida a votación en los próximos meses y, en caso de contar con el respaldo necesario, será “elevada al Ayuntamiento de Bilbao, que es quien tiene la decisión de cambiar el nombre, y al Departamento de Educación, para que dé el visto bueno”.

Tal y como explica uno de los impulsores de la iniciativa, el centro, inaugurado el 7 de marzo de 1918, se denominaba originalmente Grupo Escolar o Escuelas de Indauchu. Posteriormente adoptó el nombre de Luis Eleizalde, “uno de los creadores de Euskaltzaindia que contribuyó a introducir el euskera en la enseñanza”, dándose la circunstancia de que la Academia de la Lengua Vasca “tuvo de forma temporal su sede” en dicho colegio. Ya en la etapa franquista, el centro se volvió a llamar provisionalmente con el nombre del barrio donde está ubicado, Indauchu, para ser rebautizado en 1938 como Escuelas del Generalísimo Franco.

La denominación actual, Félix Serrano Zabala, fue aprobada en 1961. Según relatan las citadas fuentes, dicho nombre “fue designado por el Ayuntamiento en la época franquista teniendo en cuenta sus virtudes patrióticas, religiosas y docentes, tal y como queda recogido en un informe municipal”. Además, añade, “se basaron en una orden ministerial de Educación de 1938, en la que se proponía revisar los nombres de las escuelas con anterioridad al 18 de julio de 1936 con el fin de que su denominación responda plenamente a los ideales de nuestro movimiento nacional”.

Todo ello le hace concluir a este padre que Félix Serrano, que “fue distinguido con sendas medallas durante la dictadura de Primo de Rivera y la etapa franquista”, era “afín al régimen”. Además, añade, “no ejerció jamás en las escuelas que llevan su nombre. Estuvo de docente en La Normal de Magisterio de la calle Iturribide y, como director, en las de Berastegi, donde está el Palacio de Justicia de Bilbao, en Jardines de Albia”. Tampoco, argumenta, es “referente alguno de la cultura vasca que desarrolla e imparte la escuela”.

Tras recopilar un buen puñado de actas municipales y documentos con los que apoyar su petición, este grupo de padres plantea que el centro recupere su primera denominación. “La mayoría de vecinos de Bilbao y todo el mundo que ha estado en las escuelas las ha conocido popularmente como Escuelas de Indautxu”, asegura uno de los promotores de la iniciativa, para quien esta podría “enmarcarse en la Ley de Memoria Histórica”.