En el corazón de la reserva de Urdaibai, rodeado de montañas que abrigan su presencia, se ubica el hotel Urune. Hace pocos días ha sido galardonado en el marco de la feria Fitur en el concurso Re Think Hotel, donde se reconocen los diez mejores proyectos de sostenibilidad hotelera y rehabilitación a nivel estatal. Con unos principios básicos en políticas medioambientales y unos hábitos donde se cuida hasta el más mínimo detalle, el parador ubicado en la localidad de Muxika ha logrado colarse por méritos propios en un listado que copan las grandes cadenas hoteleras.
El certamen Re Think Hotel cumplía este año su tercera edición, teniendo como objetivo el reconocimiento y promoción de los diez mejores proyectos de sostenibilidad y rehabilitación hotelera en España en 2016. Su jurado está integrado por destacados profesionales del turismo y de la edificación y sus criterios de valoración se rigen por los 17 objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas. Los premios se dividen en dos categorías: los mejores proyectos de sostenibilidad y rehabilitación hotelera por ejecutar, y los mejores proyectos de sostenibilidad y rehabilitación hotelera ejecutados, que es el que ha logrado el parador muxikarra.
“El premio representa el reconocimiento al trabajo de muchos años, porque desde que arrancamos con la rehabilitación del edificio hace 11 años, hemos tenido siempre muy claro que tenía que ser sostenible y hemos cuidado mucho ese aspecto” detalla orgullosa Aurkene Redondo, propietaria del establecimiento.
Y es que desde que abrieron sus puertas a finales de 2008, el hotel Urune ha pasado por el filtro de la sostenibilidad todos aquellos detalles que marcan el funcionamiento del hotel. Las medidas sostenibles comienzan desde el punto de vista arquitectónico, ya que intentaron en todo lo posible mantener los materiales originales del antiguo baserri, un edificio del año 1780, con un valor histórico y exponente claro de la arquitectura de la época. Además, desde el punto de vista energético Urune basa su funcionamiento mediante calderas de biomasa, un aerogenerador o placas fotovoltáicas que ayudan a crear la energía necesaria. También tienen en cuenta detalles como el uso de lámparas LED, la reducción de plásticos y envases, o la disminución del caudal de los grifos. Por poner un ejemplo de su cuidado, los típicos jabones que proporcionan en los hoteles, en su caso son productos artesanos elaborados en la propia comarca y llevan un dosificador para no generar más basura de la necesaria.
Tal y como apuntan los organizadores del certamen que ha premiado a Urune, la sostenibilidad aplicada al turismo y al sector hotelero hoy por hoy tiene beneficios directos como la reducción de costes o el aumento de la calidad, confort y atractivo hotelero. Algo que puede ayudar en la confección de las estrategias de marketing, ya que la atracción turística que genera va en aumento día a día. La sostenibilidad es, por tanto, un valor en alza en el mercado turístico y hotelero. “Este es un hotel rural y en el segmento en el que funcionamos sí es importante la sostenibilidad, sobre todo en verano, cuando se aloja gente extranjera y con un perfil muy marcado en ese sentido”.
A tal punto llega la concienciación que a los responsables del establecimiento algunos turistas les han llegado a llamar la atención por tener demasiadas luces encendidas . “Es gente muy consciente y muy responsable en ese sentido” apunta Izaro Bideguren, empleada del hotel.
Según datos del Instituto de Turismo Responsable, Global Sustainable Tourism Council, dentro de la oferta hotelera el 90% de los viajeros elegiría un establecimiento sostenible y el 34% estaría dispuesto a pagar más por alojarse en ellos. Por ello, cuestionada por qué es lo que hace especial al hotel ubicado en Urdaibai, Redondo contesta que “lo que ofrece Urune que no ofrecen el resto de los hoteles que fueron premiados es que es un destino muy cercano, muy familiar, donde la gente se siente muchas veces como en casa. De hecho, muchas personas suelen andar descalzas por todo el hotel. Ese vínculo con la tierra y la gente de aquí, estar muy cerca de las personas y sus costumbres, el tener ese trato tan personalizado, es uno de los valores que más aportan al huésped”. Urune, por tanto, representa un pequeño rincón donde descansar, en armonía con el entorno natural que lo cobija.