Termibus se mudará en noviembre al solar de Garellano

Bilbao - El Ayuntamiento recibió ayer el proyecto para habilitar la estación de autobuses provisional de Termibus. Unas instalaciones temporales que se ubicarán en un solar contiguo a la actual Termibus, al lado de los rascacielos de Garellano, y que, según los cálculos dados a conocer ayer en comisión por el concejal de Obras, Servicios y Rehabilitación Urbana, Ricardo Barkala, entrará en servicio el próximo mes de noviembre.

Barkala compareció junto al edil de Circulación y Transportes, Alfonso Gil, a petición del grupo municipal popular para que explicaran las consecuencias que en materia de tráfico va a tener para las calles del entorno la construcción de la nueva terminal de autobuses.

Ambos miembros del equipo de gobierno municipal reconocieron las grandes dificultades que se van a sortear. Barkala fue expresivo al decir que “para hacer una tortilla habrá que romper huevos”, mientras Gil aseguró que “vamos a tener que hacer mucho en muy poco espacio y lo vamos a hacer lo mejor posible”.

El edil jeltzale indicó que aún no se han cerrado los detalles de cuáles van a ser las afecciones al tráfico del entorno y las soluciones que se van a tener en cuenta.

El escenario va a ser muy complicado. Además del tránsito de camiones de la propia obra de Termibus, habrá que lidiar con el propio tráfico de autobuses y los cercanos accesos de San Mamés. A ello hay que añadir que, en dos meses, comenzarán las excavaciones del cuarto rascacielos de Garellano, ubicado al lado de la Termibus provisional, y que hasta principios del que viene no se terminarán de construir los cuatro bloques de viviendas que se levantan en la calle Luis Briñas, así como su urbanización correspondiente que ejecutará Bilbao Ría 2000.

Tras firmar hace un mes el contrato con la empresa constructora de las nuevas instalaciones, ayer ésta entregó el proyecto de lo que será la terminal provisional. Barkala indicó que ahora “tenemos que convertir el proyecto en ejecutable” con el objetivo de redactar un documento que sacarán a concurso para acometer las obras en setiembre y octubre con la intención de hacer la mudanza de autobuses y servicios en noviembre.

El concejal no dio muchos datos ya que el proyecto de Termibus provisional está por cerrar por parte de los técnicos de su área pero sí adelantó que los autobuses entrarán por la esquina del solar pegada a la calle Gurtubay y que saldrán por la calle paralela de Luis Briñas. También que el espacio triangular albergará 20 dársenas en forma de espina de pez, tres menos de las que dispone ahora Termibus.

Reasignación de espacios Fran Víñez, director de Obras y Servicios, especificó que a pesar de la rebaja, la zona de estacionamiento va a ser suficiente al cambiar el régimen de asignación de espacios. En la actualidad, cada línea tiene una dársena fija. Tanto en el espacio temporal como en la Termibus definitiva, la asignación de las bahías será aleatoria en función de las necesidades puntuales del servicio.

En la estación provisional, las taquillas se ubicarán en las lonjas del edificio de viviendas de Garellano más cercano y se habilitarán espacios para la parada de taxi actual, los servicios de la estación y, si se puede, algunas unidades pasarán la noche como ocurre en la actual Termibus. “Vamos a intentar cubrir las necesidades básicas de viajeros y operadores pero seguro que va a ser una situación más incomoda”, avisó el edil.

El calendario en vigor cuenta con la aquiescencia de las compañías de autobuses que han pedido que el traslado no se efectuara hasta pasado el mes de setiembre debido al gran movimiento de viajeros existente hasta entonces por las vacaciones de verano. Otro dato del planning a tener en cuenta es que el solar triangular ha sido cedido por Bilbao Ría 2000 con el compromiso de dejarlo libre en noviembre de 2017 para que pueda sacar a la venta esa parcela y construir el quinto rascacielos de Garellano.

Un año que se antoja escaso para habilitar las nuevas dependencias subterráneas de Termibus. Barkala aclaró que “por una parte puede haber margen de tiempo en el proceso de Ría 2000 y, si nos tenemos que salir, tendríamos el plan B de habilitar espacios provisionales en la nueva terminal bajo superficie hasta que se concluya definitivamente”.

La oposición resaltó la perdida de plazas de estacionamiento en la calle Pérez Galdós y cómo van a afectar a los vecinos de Garellano las colas de personas que saquen billetes en las taquillas provisionales. Barkala admitió que “en momentos puntuales como Aste Nagusia o Sanfermines puede haber congestión pero que se tomarán las medidas necesarias para minimizarlas”.

Otro dato nuevo aportado fue que la terminal subterránea tendrá sus accesos de salida y entrada exclusivamente por la calle Gurtubay. Carmen Muñoz, de Udalberri, mostró su preocupación por la “saturación de esa calle” y las molestias a los vecinos. Fran Víñez le indicó que “se ha optado por esta vía porque, precisamente, en esa zona hay edificios de servicios como Hacienda, EiTB o Ingenieros y no se va a dar afección residencial”.