BERANGO - El primer día de mayo ofreció una jornada dominical perfecta para honrar a todas las amatxus y trabajadores. Con un sol radiante y una temperatura primaveral, el parque Moreaga fue el epicentro de Berango con motivo de la XXIII edición de la feria agrícola y artesana que acoge cada año la localidad, organizada por el incombustible y gran dinamizador del municipio, el colectivo cultural Simon de Otxandategi, que contó con el patrocinio del Ayuntamiento de Berango y la BBK. “Hemos preparado una paella para 200 personas, una alubiada para cien y otras tantas raciones de croquetas para la gente”, indicó el presidente de Simon Otxandategi, Iñaki González. Y todo ello por el simbólico precio de un euro la ración.

Por tanto, acudir a la feria fue un plan idóneo para disfrutar del último día de la semana en cuadrilla, pareja o en familia, degustando multitud de productos de primera calidad que compitieron al mediodía en horario con el partido del Athletic en San Mamés, una liturgia casi sagrada para los vizcainos y con una masa social muy fiel. “Muchas personas han venido a primera hora para luego ir a ver el partido y otras vendrán después”, comentaban entre ellos los baserritarras de los 64 puestos que se instalaron ayer en Berango.

Productos hortícolas, flores y plantas naturales, chacinería, conservas de pescado, diferentes quesos, miel, txakoli, chocolate, paté, trufas, etc. Los mejores productos del agro vasco estuvieron presentes en Berango porque nadie quería perderse una cita tan relevante en el calendario.

Desde primera hora se registró una gran goteo de gente por los alrededores del parque Moreaga y los baserritarras y productores lo agradecieron. “Aquí pasteles dentro de media hora ya no quedan. Los que dan una vuelta primero y dicen que luego lo cogen... se quedarán sin él”, comentaba el laudiotarra Enrique Gastaka, que no paraba de despachar género en su puesto de pasteles y panes. Y es que, haber sido cuatro años campeón de Euskadi de pastel vasco supone un carta de presentación al alcance de muy pocos.

En el marco de la feria también tuvo lugar el XVIII campeonato de Euskadi de pastel vasco. Por eso, a la cita acudieron los mejores productores vascos, en un intento en vano por arrebatar a Leire Balaustegi, de la localidad alavesa de Izarra, un premio que también se llevó el año pasado y en 2012. Ante este nuevo galardón se mostró muy contenta por tratarse de un reiterado reconocimiento a su labor.

En este sentido, otro de los stands que también registró un gran nivel de afluencia fue el de Ana Añibarro, del baserri Ellako, de Orozko. “Suelo ir a todas las ferias. Tengo pastel vasco, de queso y repostería en general”, indicó, además de un suculento pan casero con nueces y pasas.

Sobre esta línea, una de las habituales en este tipo de eventos y que ofrece los mejores productos recién extraídos de la huerta es Ángeles Andikoetxea, baserritarra de Urduliz con una amplia trayectoria en ferias agrícolas. “Antes venía más porque con la edad te vas cansando”, señaló. En esta ocasión, sus clientes habituales no le perdieron la pista y los nuevos se sorprendieron con la variedad y frescura de sus productos. “Tengo berza, calabaza, puerros, acelgas, lechugas, espinacas, alcachofas..., y plantas, que es la época”, resumió. Asimismo, el acento internacional lo puso un productor galo, Ossau-Iraty, que ofreció una importante selección de quesos típicos franceses. “Vamos a ferias desde hace diez años. Compramos la leche a pastores y hacemos nosotros la curación de los quesos. Para hacer cada uno, necesitamos 45 litros de leche, y las ovejas que utilizamos dan 1,5 litros al día, tres veces menos que una normal”, explicó Marie, quien junto a Jocelyn, ambos de Baiona, dieron a conocer a los asistentes las peculiaridades de sus exquisitos quesos.

Por último, además de la feria agrícola también hubo 24 stands de artesanía con una gran variedad, desde regalos a productos de reciclaje, cuero, talla de piedra y madera, regalos, bordados, bisutería o Goma Eva, que completaron un recinto ferial con multitud de alternativas.