BILBAO. El Ayuntamiento de Bilbao ha presentado este jueves un trabajo sobre la realidad del botellón en la Villa, cuyo objetivo es lograr "un equilibro entre una ciudad joven y viva y el reconocimiento del derecho al descanso", por lo que se busca "satisfacer el ocio de personas jóvenes, reducir conductas de riesgos, fomentar la convivencia mediante conductas cívicas con jóvenes, vecinos y hosteleros", en una práctica que sólo realiza habitualmente un 5% de jóvenes.

En rueda de prensa, la concejal de Juventud y Deporte, Ohiane Agirregoitia, que ha estado acompañada por la directora del área, Idoia Uriarte, ha anunciado que el Consistorio prevé poner en marcha un programa piloto de mediación, con educadores de calle, en las zonas en las que se práctica el botellón.

El trabajo comenzó a realizarse el pasado mes de noviembre de 2015 con el fin de "paliar algunas de las consecuencias generadas por el consumo de bebidas alcohólicas en la calle, tanto en las personas jóvenes que lo practican como sus consecuencias directas en la ciudad".

El área de Juventud y Deporte coordina un trabajo, en el que colaboran distintas áreas municipales, con el fin de buscar una solución de consenso y satisfacer, por un lado, la búsqueda de ocio de personas jóvenes en Bilbao y por otro lado, la convivencia mediante conductas cívicas entre jóvenes que quieren disfrutar, vecinos que quieren descansar y hosteleros que quieren evitar problemas, al tiempo que finalmente, busca aminorar las "conductas de riesgo" producidas por los excesos entre los más jóvenes.

Este proyecto ha actualizado la información recogida en el estudio llevado a cabo por el mismo área a finales de 2014. Entre los temas relacionados con el botellón que se han analizado, se encuentran los diferentes puntos del municipio donde se practica; los tipos de "botellones" que conviven o el trabajo realizado desde las diferentes reas del Consistorio bilbaíno para contrarrestar los efectos negativos de esta práctica en relación a suciedad, molestias vecinales, consumos excesivos) además de concretar los perfiles de las personas jóvenes que practican.

Asimismo, se ha contrastado directamente con grupos de jóvenes, teniendo en cuenta su opinión al respecto y las posibles alternativas que ellos mismos plantean.

PERFIL DE JOVENES

Agirregoitia ha explicado que en Bilbao, el perfil de joven que practica botellón, según la encuesta del Area de Juventud y Deporte realizada en 2014 con una muestra de 1.756 personas, habla de un 56% chicos y un 44% chicas, con una media de edad de 19 años (desde 16 años hasta 24 años).

Según ha dicho, la mayoría de las personas participantes son estudiantes, que se reúnen en grupos de cuatro personas de media y mayoritariamente en grupos mixtos (60%)

La edil ha afirmado que el botellón "no es una práctica muy frecuente" y ha explicado que tomando en cuenta los datos contrastados con diversos estudios sobre hábitos de consumo como la Encuesta sobre Adicciones de la Comunidad Autónoma Vasca en 2012, el 47,2% de las personas jóvenes nunca practican botellón, el 5,1% de los ellos lo practican habitualmente, el 21,1% lo hace 1 ó 2 veces al año, el 12,3% lo práctica una o dos veces al mes y el 12,8% no ha probado el alcohol.

Respecto al impacto del trabajo municipal de diferentes áreas del Ayuntamiento en los espacios de botellón y consumos en la ciudad, el

Área de Salud y Consumo trabaja este tema desde una visión educativa, tanto en el ámbito escolar como familiar. Durante el pasado curso escolar 2014-2015, fueron más 15.600 niños y jóvenes quienes participaron en diferentes talleres de acción preventiva, y 1.185 padres y madres quienes recibieron información y formación en materia de salud y prevención.

Además, desde el área de Obras y Servicios, Rehabilitación Urbana y Espacio Público, los fines de semana, por razones de botellón se destinan parte de los recursos humanos a las tareas de limpieza de la Villa, que llegan a 21 operarios, 9 oficiales y 12 peones.

En cuanto al área de Seguridad Ciudadana, en 2015, se abrieron un total de 301 expedientes sancionadores por incumplimiento de las ordenanzas municipales en este aspecto.

Por último, el Area de Atención Ciudadana, Participación y Distritos se encarga de redirigir las sanciones impuestas por la Policía Municipal mediante el cumplimiento alternativo de trabajos (Programa "Adiskidetuz") y apoyo a ONGs bilbainas con el fin de que estos chicos y chicas desarrollen una actitud crítica y más responsable con la comunidad.

PRINCIPALES CONCLUSIONES DEL TRABAJO

Algunas de las conclusiones obtenidas tras el trabajo realizado indican que la juventud busca espacios de socialización entre iguales. y que en un contexto de relaciones sociales donde el alcohol está presente, los consumos de los jóvenes están relacionados con ritos de iniciación a la madurez.

En lo que a espacios de consumo de bebidas alcohólicas se refiere, la primera opción son los bares, las segundas son las discotecas, la calle ocupa el tercer lugar y las lonjas el cuarto, mientras que, según ha indicado Agirregoitia, los niveles de "agresiones y destrozos son bajos", si bien la suciedad, los ruidos y los orines generan problemas que alteran la normal convivencia, especialmente en algunas zonas de la ciudad.

Respecto al mapa del botellón, hay, según ha dicho, "una gran diferencia" entre espacios urbanos y no urbanos, con diferentes consecuencias de convivencia, que tienen que ver directamente con las ubicaciones con las discotecas y zona de bares.

PROPUESTAS A DESARROLLAR

Con este trabajo sobre la realidad del Botellón en Bilbao, el área de Juventud y Deporte ha concluido que se trata de un proyecto "abierto y participativo", que se pretende desarrollar con la participación de todas las partes que, de una forma u otra, resultan afectadas. En esta primera fase, las acciones concretas planteadas pasan en primer lugar por crear un espacio de encuentro entre los diferentes agentes que intervienen en el botellón.

Además, se fomentarán "actitudes responsables" en la gestión de los riesgos asociados al consumo, manteniendo e impulsando las medidas previstas en el Plan de Drogodependencias. Además, se impulsarán acciones de sensibilización adecuadas que posibilite la reducción de daños y molestias, tanto a pie de calle mediante mediadores como por los canales más utilizados por personas jóvenes.

Se promoverá igualmente una agenda cultural, de ocio y de deporte para personas jóvenes acordes a sus intereses, así como la colaboración del sector hostelero en la reducción de molestias a los vecinos y vecinas.

Igualmente se reforzará el carácter educativo de las sanciones y desarrollar un programa útil y eficaz que posibilite un nuevo cumplimiento alternativo a las sanciones impuestas por la Policía Municipal ante comportamiento incívicos y conductas de riesgos.

Por último, se organizará una Jornada de trabajo sobre el Botellón con personas expertas en consumos, tipos de ocio, juventud y personas del ámbito de la hostelería con el fin de conocer y analizar nuevas propuestas.