durango- Fue en 1864 cuando unos durangarras encontraron en el barrio Mikeldi, esta escultura zoomorfa que representa a una religión pagana y que fue bautizada como el Ídolo de Mikeldi. Meses después de su descubrimiento, fue cedida al Museo vasco. Sin embargo, el eterno debate se ha centrado en la necesidad de reclamar a Bilbao la devolución de la escultura. Ayer todos los partidos políticos, por unanimidad, acordaron iniciar las gestiones pertinentes para pedir que el Ídolo vuelva a tierras duranguesas. “Hemos aprobado en Junta de Portavoces llevar el tema a la comisión de Cultura y ver cómo podemos ponermos en marcha con respecto a este tema”, señaló en el pleno de ayer la alcaldesa de Durango, Aitziber Irigoras.

Recientemente, el pasado mes de marzo, el Museo Arqueológico dio a conocer las obras de restauración que se han llevado a cabo sobre la escultura, para evitar que la humedad consiga deteriorar aún más la pieza. Por ello, la Fundación Gondra Barandiaran en colaboración de la Diputación de Bizkaia han invertido cerca de 100.000 euros en los últimos seis meses.

Los portavoces del Ayuntamiento de Durango sostienen que el Museo Kurutzasantu, donde se ubica actualmente la Cruz de Kurutziaga, podría ser el lugar idóneo para esta escultura de la II Edad del Hierro.

Euskotren La nueva tarificación de Euskotren fue otro de los asuntos tratados ayer en el pleno de Durango. Desde hace unas semanas, Berriz y Zaldibar han pasado a formar parte de una zona diferente a la anterior, lo que supone que los vecinos de ambas localidades tienen precios más elevados para poder viajar hasta Durango. Los partidos políticos aprobaron ayer una moción en la que instan a Euskotren a que revise las zonas y la tarificación para que los berriztarras y zaldibartarras pasen a tener los precios anteriores. “He hablado con el alcalde de Berriz, Orlan Isoird y le he mostrado mi apoyo y disposición para ayudar en lo que esté en mi mano”, informó ayer la alcaldesa de Durango, Aitziber Irigoras. “Me consta que se están llevando a cabo muchas gestiones, tanto con Euskotren como con el Consorcio de Transpotes de Bizkaia”, añadió la primera edil durangarra.

Según las nuevas tarifas, los viajes comunes entre Durango y Traña, Berriz o Zaldibar valdrán 1,95 euros, cuando hasta ahora se abonaba 1,70 euros. En este sentido, utilizando la tarjeta Barik, el trayecto es 31 céntimos más caro que antes: 1,24 euros. Por otro lado, el bono mensual costaba 30 euros hasta la semana pasada y ahora cuesta 36,50 euros.