BILBAO. Responsables municipales han comunicado hoy en una comisión informativa esta decisión, que deberá ser aprobada por el pleno del consistorio que se celebrará el jueves de la semana próxima.

El pasado 22 de diciembre, el pleno del Ayuntamiento bilbaino aprobó que no se puedan abrir discotecas a menos de 200 metros de viviendas, hospitales, colegios y residencias para mayores, con el fin de impedir la instalación de la macrodiscoteca en Deusto.

El pleno acordó así, con la única posición favorable del PNV, los votos en contra de PSE-EE y EH Bildu y la abstención del PP, una modificación inicial de la ordenanza sobre establecimientos de hostelería en la que se determinan las nuevas distancias que deberán respetar los locales de los grupos II (pubs) y III (discotecas).

Tras esta aprobación, la Asociación de Hostelería de Bizkaia y la empresa Jalujo Hostelería Norte, promotora de la discoteca en Deusto, presentaron alegaciones contra dicha modificación de la ordenanza, pero el gobierno municipal ha considerado que "no tienen fundamento para ser estimadas".

Según los responsables municipales, las alegaciones de la asociación de hosteleros consisten más bien en unas "consideraciones filosóficas sobre el sector" y en unas "propuestas vagas" en las que defiende que se permita que los locales del grupo II debidamente insonorizados puedan convertirse en establecimientos del grupo III.

El gobierno municipal tampoco ve fundamento para aceptar las alegaciones de los promotores de la macrodiscoteca de Deusto, ya que aducen una "restricción de derechos urbanísticos" que a juicio del consistorio no se produce.

Por ello, el Ejecutivo local ha propuesto que en el pleno ordinario del jueves 26 de febrero se rechacen dichas alegaciones y que, una vez incorporadas algunas "sugerencias" hechas por el área municipal de Salud y Consumo, se apruebe definitivamente la nueva ordenanza de hostelería.