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Una lezamarra de cuento

La periodista y presentadora Sara Gandara logra un primer premio en Txorierriko Ipuin Leihaketa

Una lezamarra de cuentoEITB

Lezama

SUs jornadas están cuajadas de guiños de foco. De cámaras implacables. De sesiones de maquillaje, sonrisa y trabajo en firme. La televisión es su hábitat y la comunicación el oxígeno que inhala cada día. La periodista y presentadora Sara Gandara vive sumida en un frenesí de grabaciones y directos. Por eso, de vez en cuando, esta lezamarra necesita alzar los brazos pidiendo tiempo; necesita bajarse del vertiginoso día a día y sumirse en unos momentos de silencio, página en blanco, bolígrafo y escritura terapéutica. "Como desahogo", explica. Y en una de esas noches de sosiego y tinta nació Izotza bezain hotz, el relato que le ha hecho ganadora del primer premio en el concurso de cuentos de Txorierri en la categoría de mayores de 16 años. "Aquella noche me senté a escribir y fluyó...", explica.

Es la Mancomunidad de Txorierri la entidad que organiza este concurso de cuentos en euskera que cumple ya su decimosexta edición. En esta ocasión, en la categoría de adultos, el premio ha ido a manos de esta periodista, un rostro más que conocido para los espectadores de ETB. Sara comparte este primer puesto con el deriotarra Jon Txasko, que presentó el cuento titulado Eskuari helduta ibili zen matxinsaltoa. Y es que, este año el jurado ha decidido otorgar dos primeros galardones en esta categoría debido a la calidad de ambos trabajos. "Tengo muchas ganas de leer el otro relato que también ha ganado el premio", afirma Sara.

Euskal Herria zuzenean, Duelo en la cocina o Ya queda menos, son los programa de ETB en los que Sara ha trabajado estos últimos meses. Esta lezamarra ha consolidado su nombre en la pequeña pantalla. Pero la fama, el hecho de ser conocida, no le ha desarraigado ni un ápice de su Lezama, de su valle. "¡Soy de Txorierri!", exclama riendo y dando una palmada sobre la mesa. Por eso, porque está muy orgullosa de sus raices, Sara procura participar y disfrutar de los eventos que se organizan en la comarca.

De hecho, este no es el primer concurso literario en el que toma parte dentro de Txorierri. Hace dos años participó en el Mikel Zarate Saria que convocan anualmente el Ayuntamiento de Lezama y la editorial Elkar. En aquella ocasión no hubo suerte, pero Sara ejercitó el arte de escribir cuentos, un género al que no estaba habituada. El segundo intento ha llegado con la puesta en marcha de esta última edición de Txorierriko Ipuin Leihaketa. Sara no se lo pensó cuando se enteró de la convocatoria y se puso manos a la obra. Izotza bezain hotz es un relato que versa en torno a una temática muy pegada a la realidad de hoy día. "Refleja una situación actual, algo que le puede pasar a cualquier familia en este contexto de crisis", explica. "Plasma ese pulso entre amor, crisis y familia", añade. "Siempre he estado muy sensibilizada con respecto a este tema. Ha coincidido que en esta época de crisis ha sido cuando más he currado. Pero he visto a mi alrededor a gente sin trabajo, que no puede pagar facturas...", se duele. "He escrito un relato que plasma una historia de amor a la que le afecta la crisis", resalta.

seguir escribiendo Se enteró de que había ganado el premio porque un amigo le felicitó en la calle, en su pueblo, Lezama. "Me puse súper contenta. Lo colgué en Twitter, en Facebook...", afirma. "Este premio me anima a seguir. Me gusta escribir, aunque sea a modo de desahogo para, con el paso del tiempo, poder volver a leer lo escrito y ver cómo me sentía...", narra.

Sara lleva años en el mundo de los medios de comunicación y ha forjado su perfil profesional en la televisión. Pero también conoce bien otros formatos. "Mi paso por DEIA fue mi única experiencia en prensa escrita. Fue ahí cuando tome conciencia de lo mucho que me gusta escribir", asegura.

Ahora, esta lezamara espera con ilusión la celebración de la entrega de los premios de Txorierriko Ipuin Lehiaketa, que tendrá lugar el viernes 31 de enero en Kultur Birika de Derio. "He pedido el día libre y todo...", asegura con una de esas sonrisas suyas, francas, contagiosas, de chica de cuento.