Muskiz. El último bar que se erguía en el centro de la playa de La Arena, el Garmendia, desaparecerá esta primavera después de que la Demarcación de Costas haya comunicado a sus arrendatarios el cese definitivo de la concesión administrativa y la obligación de su desalojo, antes del 17 de marzo, para su posterior derribo. Una demolición que deberá ser ejecutada por la Diputación Foral de Bizkaia y que dejará sin atención hostelera a miles de usuarios del arenal vizcaino y a siete personas sin empleo.

"En invierno hay menos gente pero en la temporada de verano llegamos a estar seis o siete personas además de mi hermana Conchi y yo", señala José Mari Garmendia titular de la explotación que durante los últimos 25 años ha saciado la sed y el hambre de muchos bañistas y visitantes de esta playa. "Es una lástima que después de tantos años establecidos en la playa cierren este establecimiento sin que nos hayan ofrecido ningún tipo de solución o alternativa razonable, sobre todo, cuando no parece que vayan a cubrir el hueco que dejará su desaparición en la zona de Muskiz", se lamenta Garmendia. A sus 78 años el titular de este negocio recuerda que, tanto él como sus hermanos, nacieron a escasos metros del local, en el antiguo bar Garmendia, derribado en 1985.

"Cuando lo derribaron estuvimos en un chiringuito de hierro durante varios años hasta que la Diputación foral construyó el local actual", recuerda este miembro de una estirpe de hosteleros cuyo progenitor, José Ignacio regentó el bar con el mismo nombre que se encontraba ubicado muy cerca del actual puesto de la Cruz Roja de la playa.

El actual Garmendia -por el que pagaba una renta de unos 7.000 euros al año- se ubica sobre los terrenos que con anterioridad ocupara un cuartel de carabineros, encargados de la vigilancia de la costa. "Este cuartel era conocido como el Gurugú", recuerda Garmendia.

Nuevo derribo El previsto derribo del bar Garmendia, que no afectará al resto de servicios que erigió la Diputación foral en la misma zona de la playa, es el tercero que decreta la Demarcación de Costas en este arenal perteneciente a los municipios de Muskiz y Zierbena.

Después de la reubicación del antiguo Garmendia, la aplicación de la Ley de Costas ha supuesto la desaparición de otros dos inmuebles hosteleros: el muskiztarra bar Monreal, ubicado en los bajos de una casa unifamiliar situada en la actual plaza que da acceso a la playa. El más recientemente, en 2009, fue el también popular Itsas gane, situado en terrenos de Zierbena. "Parece que lo que quieren es instalar chiringuitos móviles que ocuparán unos 150 m2 y se les otorgará el asentamiento a través de subasta", reseña Conchi Garmendia quien lamenta que Costas no haya esperado a hacer el paseo que tanto anunció. "Ahora no tiene dinero para hacerlo, pero a nosotros nos dejan en la calle", concluyen.