En una entrevista el legendario Jimi Hendrix confesaba que cuando rompió su guitarra fue como un sacrificio, "porque uno sacrifica lo que más ama". Mil y un teorías y metáforas orbitan en la galaxia alrededor del dios sol de la música, la guitarra, desde el cuerpo de mujer al duende que se balancea entre sus cuerdas. A ella se entrega con pasión Juan José Heredia, Niño Joselepara los carteles. Y no solo a la guitarra flamenca, sobre la que sabe latín, griego y gramática parda sino también sobre el jazz, el tango y otros ritmos que piden que temple y mande; que se manolenta o un peregrino atormentado -con prisas por llegar...- según se tercie. El Niño Josele se ha hecho grande...
Ayer regó el Teatro Campos de emociones, como si fuese un jardinero capaz de hacer florecer el pellizco. Lo hizo en el marco del festival Bilbao Flamenco 2013, donde llegó para presentar su último trabajo, El Mar de mi Ventana, que el propio artista resume con arte. "El mar es el flamenco, que se nutre de muchos ríos, de muchas fuentes", dice. Y uno atisba, por detrás de esa frase, la acusación de los puristas que tantos años llevan gritando ¡anatema! ante cualquiera que desafíe sus cerradas leyes.
Lo dicho, el Teatro Campos vibró como las cuerdas del instrumento del Niño. Desde el psiquiatra de Avances Médicos, S. A., Norberto Mascaró, hasta Javier de la Cruz, pasando por Mónica Landolfi, Ricardo Giménez, Jénifer Giménez y Roberto Jiménez, el delegado de la SGAE, Ignacio Casado, Iñigo Larroque, Soledad Domínguez, Amaia Mendieta, José Carreño, Inmaculada Bandeira, Roberto García, José Heredia, quien subió de Jaén hasta Bilbao hace cuarenta años y aún conserva el gusto por sus raíces y se acercó al teatro con veneración de peregrino al Niño, María José Ortega, Natxo Salinas, Ana Otalora, Ignacio Eduardo, Iñaki Martínez, José María González, Carmen Hernández, Paco Salazar, Tocalotó, según le bautizaba su amigo Quique Ballesteros, entre la guasa, la mala leche y la picardía; Ana Ortuzar, Mikel Gordejuela, Carmen Basaldua, María José García, Ignacio Salaberria, Manuel Carrasco, Pepito Hernández, Jokin Arakistain, Aitor Murua, Luis González, Mari Carmen Machado, Inés Beltrán, José Luis Martínez, Amaia Martín, Ana Urrutia, María Luisa Ortiz, y un buen número de asistentes que acudieron a dejarse llevar por un espectáculo intimista y entregado, presentado en formato de septeto, con el baile de Juan de Juan como acompañamiento. No por nada le han llamado el sucesor de Paco de Lucía mientras él pone su guitarra al servicio de cualquier ritmo que provoque.