Mungia

Era una persona especial, quienes le conocieron entenderán lo que quiero decir", comentaba Joseba Sevilla, miembro y excompañero de Rafa San Román, Txatola, en la fanfarria Txikuri de Mungia. La figura de Txatola se ha convertido ya en un personaje histórico de la localidad desde que falleciera hace unos años. Él era el bombo de la fanfarria y el buque insignia del grupo, la fiesta y el buen ambiente. Tanto es así que se ha convertido en el protagonista del cartel ganador de estas fiestas de San Pedro.

Sus compañeros, gratamente sorprendidos por el homenaje, cuentan que un herrero retirado de Mungia, conocido como Txikuri -quien diera nombre a la fanfarria- les regaló el bombo de esta agrupación que lleva más de 30 años animando las fiestas de innumerables localidades, pero, sobre todo, las de Mungia, el pueblo que le vio nacer.

Txatola, como era conocido en Mungia, "era muy verbenero y nos hacía movernos a todos", asegura Sevilla. De hecho, cuando decidieron crear la fanfarria se juntaron miembros del grupo de txistularis con otros de la banda de música, y, Txatola, a pesar de no pertenecer a ninguno de dichos grupos, había participado en otra fanfarria y se mostró encantado de participar en el proyecto desde el principio. Su espíritu festivo y su buen humor animaban al más decaído, según cuentan los que le conocieron y quisieron, que fueron muchos.

Tanto es así que las anécdotas a lo largo de todos estos años fueron una constante, tal era el buen humor con el que protagonizaban sus actuaciones. En uno de los muchos viajes que realizó el grupo, se dice que en plena actuación, la efervescencia de la fiesta hizo que alguno se tropezara con tan mala suerte que se llevó consigo las cortinas del escenario de una sala de fiestas, instrumento incluido.

Este año, un año más, la fanfarria Txikuri participará en los Sampedros, el día 29, con una kalejira para calentar motores antes del txupinazo y, asimismo, serán los encargados de la traca final, con el ya clásico Ure-ure!

Mañana, a eso de las 20.00 horas, será cuando Marijata vea el chupín en el cielo, el sonido de un bombo retumbará en el cielo de Mungia.