El primero que lo dijo fue un científico alemán del siglo XVIII, así que puede decirse que la evolución de la humanidad no ha avanzado al mismo paso en todas sus facetas. Fue el olvidado Georg Christoph Lichtenberg quien aseguró que el amor es ciego y sólo el matrimonio le restaura la vista. La verdad es que el hombre era ateo acérrimo en cuestiones del sí, quiero. Tanto que también se atrevió a decir que un matrimonio, al contrario de la fiebre, comienza con calor y termina con frío. La de palos que habrá recibido en casa el bueno de Georg...
En las antípodas de su pensamiento se encontraba una vieja coleccionista: la irreductible Zsa Zsa Gabor. La actriz de origen húngaro se casó nueve veces (desde su novena boda en 1986 con el discutido aristócrata Frédéric Prinz von Anhalt es también llamada Sári Prinzessin von Anhalt...) y ella misma ha reconocido que fue una exageración, aunque se confesaba "creyente en las familias numerosas: toda mujer debería tener al menos tres maridos..." A buen seguro que, al grito de ¡negocio a la vista!, quienes ayer participaron en el certamen Sí Carlton-Top Bodas, celebrado en el hotel del mismo nombre, aplaudirían a la hermosa Prinzessin.
Al grano. El punto álgido de una jornada cargada de tules y alianzas llegó al filo de las 20.30 horas, cuando todo el ceremonial desembocó en un espectacular desfile que discurrió por diversos salones del hotel como si fuese un serpenteante río de, sobre todo, trajes de novia y novio. Así, Isabel Zapardiez, con más de una década vistiendo novias -ha aprendido en este tiempo que "ser novia es una actitud"-, Mercedes de Miguel y Rafael Derby mostraron un extenso ajuar de creaciones que encandilaron a la asistencia, tan numerosa que hubo de hacer guardia en la calle al abarrotar los salones. ¿Quién dijo que las bodas eran asunto de otros siglos...?
A la cita en la que desfilaron, entre otros, Angelina Bialy, Alazne Bilbao, Alessandra Ching, Juan Manuel Dieste Lago, Juan Antonio y César García Hontoneda; Simonna Levenkov, Yanta Tarabukna, Juan Giménez, Adrián Ponte, Xung Nguyen o Begoña Sustacha, no faltaron el alcalde Iñaki Azkuna, Beatriz Marcos, Patricia Kamara, el cantante Mikel Erentxun, Magdalena Múgica, presidenta del club Mujer Siglo XXI; Kristina González Bilbao, Itziar Zubieta, Yolanda del Hoyo, en el papel de la perfecta anfitriona; Berta Longas, la diseñadora Isabel Hormaechea, el fotógrafo Txetxu Berruezo y un sinfín de invitados que se arremolinaban alrededor de las alfombras.
A esta procesión de visitantes se sumaron el arquitecto César Caicoya, Iñaki Iriarte, Pedro Ruiz Aldarsoro, Maite Lastra, María Jesús Cava, Olga Zulueta, Natalia Gómez-Rubiera, María José Zabala junto a su hija Paula Latorre, Belén Delgado, Marta Aguilar, master & comander en el mundo de la moda; Alicia Pastor, Jon Aldeiturriaga, Arantza San Andrés, Jorge Canivell, Concha Palacios y toda una legión de gente admiradora de ese día único. Dicho sea con permiso: todos unos aprendices si se comparan con Zsa Zsa y Georg.