Caracolada popular por San Prudencio
La Sociedad Rakatapla repartió ayer en la Herriko Plaza de Laudio 120 kilos de caracoles en salsa
Laudio
Los laudioarras se pegaron ayer un buen y delicioso banquete de caracoles en salsa. El plato típico de las fiestas de San Prudencio, patrón de Araba, volvió a estar muy presente en domicilios particulares, txokos, restaurantes o en citas populares como la que tuvo lugar por la mañana en plena Herriko Plaza.
Comenzaron a repartirse, en forma de raciones, en el mismo momento en que las campanas del reloj de la torre de la iglesia de San Pedro de Lamuza anunciaban las doce y media del mediodía, y una hora más tarde prácticamente se habían agotado.
En total, 120 kilos de este preciado y exquisito molusco preparados de la manera tradicional por miembros de la sociedad Rakatapla fueron degustados por más de un millar de personas. "Este año hemos comprado 40 kilos más de caracoles. Es tal la acogida que tiene el acto que en la pasada edición nos quedamos cortos y no queremos que vuelva a pasar", explicó Serafín Pazos.
Como en pasadas ocasiones, Rakatapla puso a la venta unas cazuelitas de barro al simbólico precio de 2 euros. "En realidad lo que se paga es la vasija para que la gente se la pueda llevar a sus casas como recuerdo de esta jornada festiva, los caracoles se puede decir que son gratuitos", precisó Pazos. Es difícil de calcular el número de raciones que se sirvieron porque también son muchas las personas que acuden al reparto con sus propios platos o tapers pero "calculamos que se acercan a las mil".
COSTOSA preparación la caracolada comenzó a prepararse el sábado. "Estuvimos gran parte del día hasta las tantas limpiándolos. Como hizo tanta lluvia y tan mal tiempo nos costó el doble de tiempo de lo habitual. Utilizamos más de cien kilos de sal y fue una labor muy complicada y cansina". La salsa también fue elaborada la víspera y para el sabroso condimento se emplearon grandes cantidades de tomate, champiñón, chorizo picante y dulce, panceta y jamón. La cocción de los caracoles con la salsa se comenzó a realizar a primera hora de la mañana del domingo en una improvisada cocina que se ubicó en los soportales de la Casa Consistorial.
El olor del guiso no dejó indiferente a nadie y diez minutos antes de las 12.30 del mediodía ya se empezó a formar una amplia cola de laudioarras que, cazuelita o recipiente propio en mano, estaban ya ansiosos de probar y degustar el manjar. "La verdad es que siempre salen muy ricos. Yo todos los años me acerco a coger unas raciones para llevarlas a casa y comerlas después tranquilamente con mi marido", comentó Mari Carmen. Otro de los puntos de atención de la jornada dominical fue el Concurso de Caracoles en Salsa organizado también por Rakatapla. "Este año se han presentado 9 cazuelas, más o menos el mismo número que en pasadas ediciones", declaró Pazos.
Mientras el público comía caracoles en bancos, terrazas o soportales de la plaza, el jurado probaba las cazuelas y deliberaba para, a las 13.30 horas, emitir su veredicto. El primer premio fue para el grupo Bizi Poza que se llevó, por su buen hacer, 150 euros, trofeo y txapela, el segundo clasificado fue Ángela que logró 120 euros y el tercero, con 90 euros, Carlos Jiménez.