Leioa
El colegio Askartza Claret será una residencia-albergue juvenil. El Ayuntamiento de Leioa detectó la necesidad de un cambio en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para permitir que las escuelas tuvieran la opción de convertirse también en albergues juveniles e infantiles, y tras el estudio de esta posibilidad ha modificado recientemente la ordenanza para que sea una realidad. Así, el colegio Askartza ha decidido aprovechar este camino y dedicará parte de sus instalaciones a este fin.
El albergue se ubicará en lo que era el antiguo seminario de los claretianos, que está siendo remodelado y cuyas obras están ya muy avanzadas. De hecho, los trabajos estarán finalizados a principios de abril; ese mes y en mayo se dedicarán a equipar las instalaciones. El 1 de junio ya tendrían todos los permisos en orden para poder abrir, pero esperarán hasta el nuevo curso, es decir, hasta septiembre para empezar a funcionar de manera efectiva, aunque durante el verano cabe la posibilidad de que se admita a algún cliente a modo de prueba.
La residencia estará destinada a "colectivos deportivos, culturales, religiosos…", especifica Alfonso Tejedor, gerente de Askartza Claret. "Para nada queremos ser un establecimiento hotelero que va en busca del turista o de la persona individual", matiza. "Queremos dirigirnos, por ejemplo, al equipo ciclista amateur que va a participar en una carrera un fin de semana, al club de fútbol que tiene unos juveniles que vienen a la zona a jugar algún torneo... También a algún grupo religioso, a algún coro que venga a actuar, a asociaciones benéficas...", ilustra Tejedor. Así, Askartza tampoco persigue la largas estancias y calcula que será los fines de semana cuando mayor demanda tenga.
El edificio constará de tres plantas, con 70 habitaciones -todas con wifi-, de las cuales 58 son dobles y 12 familiares. Además, habrá comedor, sala de televisión y juegos, de lectura y ciber-córner, así como varios espacios al aire libre. "Nuestra obsesión ha sido separar la residencia del colegio, incluso que visualmente los alumnos no vean a la gente que estará en el albergue", destaca el gerente del colegio. Pero además de la residencia para los distintos colectivos juveniles, el edificio tendrá un espacio para eventos formativos, pensado para otros destinatarios, por ejemplo, para aquellas personas que están haciendo un postgrado en la UPV, que están participando en algún tipo de jornadas de investigación o empresariales o que pertenecen al Centro de Alto Rendimiento de Getxo, que están en seminarios… Para ellos habrá una sala de reuniones con pizarras digitales y proyectores en una parte del equipamiento separado del albergue juvenil. "Intentaremos llegar a acuerdos con varias instituciones para conseguir así clientes", afirma Tejedor.
Atalaia Claret La residencia-albergue juvenil se llamará Atalaia Claret, debido a las vistas que se contemplan desde allí. A falta de fijar los precios más concretamente, el gerente de Askartza tiene claro que se moverán "un peldaño por debajo" de los que presentan los hoteles y hostales abiertos al público en general.