Ortuella. Poco a poco, la nueva casa de cultura de Ortuella va ganando actividad. Tras su apoteósica inauguración, a la que asistieron más de 300 vecinos, y la apertura de una exposición del pintor local Julián Momoitio, ayer se puso en funcionamiento la biblioteca municipal. El servicio se encuentra situado en la segunda planta del edificio, donde en pocos días descansan, perfectamente ordenados en sus respectivas estanterías, las 20.000 referencias bibliográficas que son propiedad del Ayuntamiento.

La nueva biblioteca tiene dos secciones distintas, una para adultos, equipada con mesas y sillas, y otra parte más colorida y desenfadada donde los menores tendrán su propio rincón para la lectura. Cinco ordenadores, cuatro televisores, dos equipos de música y conexión wifi para conectarse a internet sin necesidad de cables completan el equipamiento de este moderno espacio.

"Nada más inaugurar la casa de cultura iniciamos el traslado de los libros desde la biblioteca antigua a la nueva, un trabajo que nos ha llevado algo más de un mes porque hemos aprovechado para limpiar y catalogar todos los ejemplares. Ya hemos terminado con tres cuartas partes de los fondos y ahora nos quedan unos 5.000 libros", señaló ayer el alcalde de la localidad minera, Oskar Martínez.

El primer edil recordó que el servicio de préstamo gratuito de libros cuenta con 5.000 socios -4.000 adultos y 1.000 niños- que percibirán las ventajas de las nuevas instalaciones. La principal de todas ellas es el espacio. En este sentido, Martínez recordó que la antigua biblioteca, además de estar situada en la entreplanta de un edificio de viviendas, "se había quedado pequeña". "Algunos volúmenes estaban en cajas, sin desembalar, porque no había espacio para ponerlos, por eso esperamos que las nuevas instalaciones cumplan las expectativas", explicó.

De forma paralela el Ayuntamiento de Ortuella también ha abierto al público las salas de estudio, que, por el momento, tendrán el mismo horario que la biblioteca, es decir de 11.45 a 13.45 horas por la mañana y de 16.45 a 20.00 horas por la tarde. No obstante, el alcalde desveló que se está tramitando la contratación de un auxiliar administrativo para adelantar la apertura a las ocho de la mañana e incluso ofrecer este servicio los sábados.

La creación de tres aulas de estudio ha sido una reivindicación histórica de los universitarios porque debían desplazarse fuera, tal como recordó ayer el alcalde.