Derio. El Open Internacional de Tenis de Mesa Adaptado Derio-Bilbao 2010, reunió durante el pasado fin de semana a la élite del Tenis de Mesa mundial en el Polideportivo de Derio. Un evento avalado por la Federación Internacional de Tenis de Mesa, puntuable para el ranking mundial que da acceso al próximo Mundial de Corea y a las paralimpiadas de Londres 2012. "Ha sido un éxito, no tanto en cuanto a asistencia de público, pero sí en lo que a organización se refiere", indicaron a DEIA fuentes de la organización. "Por ejemplo, ha habido más de cuarenta voluntarios. El éxito ha sido tal que hemos recibido numerosas felicitaciones de participantes y miembros del jurado", añadieron.

"Nos han planteado que volvamos a repetir la cita, sino anualmente, sí cada dos años. Es algo complicado, pero se va a valorar, dado que la respuesta ha sido muy positiva. Más de setenta deportistas de primer nivel, llegados de veinte países en total", recordaron.

Fueron tres intensos días de competición en los que los jugadores demostraron que el tenis de mesa en particular, es deporte con mayúsculas. En la cancha de Derio se asistió a un espectáculo deportivo de primer nivel. "Se ha abierto un nuevo horizonte. En 2008 el campeonato internacional del cubos Rubik fue un éxito, al igual que el campeonato de fitness de 2009. La crisis nos afecta, y mucho, pero algunos patrocinadores nos siguen apoyando", insisten desde la organización de Derio.

Hubo un elevado nivel competitivo, pues acudieron los números uno mundiales de la especialidad. Israelitas, noruegos, eslovacos o finlandeses compitieron de igual a igual con deportistas locales, de los cuales cabe destacar a Porfirio Hernández, que logró una meritoria medalla de bronce o Iker Sastre que también se hizo con un galardón.

La serbia Borislava Peri-Rankovic ganó el open en categoría femenina, mientras que el alemán Selcuk Cetil lo hizo en la masculina. De los setenta deportistas, algunos llegaron desde muy diversos lugares, como el Costa ricense Giovanni Rodríguez Granados, tras más de 14 horas de viaje, o los ucranianos y lituanos que recorrieron 8.000 kilómetros en coche para esta cinta preolímpica. Además, se contó con la presencia de árbitros internacionales de ocho nacionalidades. Debido a la huelga de controladores aéreos en París la delegación kuwaití finalmente no pudo participar y los rusos llegaron tarde.