El Departamento de Educación está abordando la fusión de los dos colegios públicos del barrio de Deusto: Deustuko Ikastola y el CEIP Deusto. El proceso de integración comenzará en la etapa de Infantil y primer curso de Primaria en el próximo curso, con “la posibilidad de integrar el resto de las edades durante el siguiente curso o los dos siguiente, según avance el proceso”. De esa manera, la idea que tienen es mantener ambos centros y su personal. Y la redistribución que manejan pasaría por mantener en el edificio de Deustuko Ikastola IPI al alumnado de Infantil y de Secundaria Obligatoria mientras que el edificio del CEIP Deusto acogería la etapa de Primaria al completo. “Estos emplazamientos están preparados en la actualidad para responder a esas necesidades”, sostienen desde el Gobierno vasco, donde están valorando las necesidades adicionales de comedor y cobertura de alguno de los espacios de recreo.
En una respuesta a la solicitud de información formulada por Ikoitz Arrese, parlamentario de EH Bildu, defienden que “estas actuaciones se enmarcan en la Estrategia Eskola Bikaina Denontzat, que establece una respuesta integral al reto de la segregación escolar y a la reorganización del mapa educativo desde criterios de calidad, inclusión y equidad”. En ese sentido, aseguran que el proceso de integración se está llevando a cabo en coordinación con un grupo de trabajo compuesto por el inspector de referencia de los dos centros, por representantes de las familias de ambos centros y por los dos equipos directivos de los centros. Además, apuntan que este grupo de trabajo “está compartiendo toda la información de las deliberaciones y acuerdos surgidos de las reuniones de trabajo”.
DISTRIBUCIÓN
Según exponen, las obras de rehabilitación del comedor y varias aulas del edificio de Deustuko Ikastola han provocado que este sea el segundo curso que el alumnado de Infantil de 2, 3 y 4 años comparta el edificio con el alumnado de Deustuko Eskola. De esa manera, señalan que fue el curso anterior cuando se llevaron a cabo reuniones con las familias afectadas para consensuar la organización que debería tener el alumnado de Infantil durante el curso 25/26 en el que siguen conviviendo. Según señalan, “en esas reuniones celebradas con familias y los dos consejos escolares se pidió a la administración que no esperara hasta final de curso para realizar las propuestas, sino que las hiciera y las trabajara desde el principio de curso y eso es lo que se ha hecho durante este curso, empezando con el proceso de integración efectiva desde octubre y haciendo públicos todos los pasos desde el primer momento”. Asimismo, señalan que se mantendrá el comedor de Deustuko Ikastola, a través de la opción de cocina in situ, y de allí se transportará al edificio de Deustuko Eskola, ubicado a escasos metros de distancia.
Paralelamente, el Departamento está valorando la inversión adicional a realizar en los dos centros, para lo que aún no cuenta con presupuesto. Lo que sí licitó el Ayuntamiento de Bilbao el pasado mes de octubre fue el contrato para la naturalización de los patios de los dos centros para lo que se destinará una partida económica de 93.911,28 euros con IVA. El objetivo de la intervención es transformar unos espacios que, en la actualidad, son “áreas rígidas, mayoritariamente asfaltadas, con una marcada predominancia de pistas deportivas”. Según detallaba el proyecto de Leku Studio, las actuaciones se llevarán a cabo en zonas acotadas. Se trata de “pruebas piloto” que ayudarán a “replantear” el modelo de patio escolar. La intervención contempla la despavimentación, la creación de parterres, la plantación de arbustos y árboles, la instalación de mobiliario y pintura en pistas.
PREOCUPACIÓN
Al margen de las mejoras de los espacios que puedan conllevar la fusión de los centros, un grupo de familias de Deustuko Ikastola ha trasladado su “preocupación” por el proceso de unificación, del que no han tenido conocimiento oficial hasta el 21 de octubre de 2025. Asimismo, dentro del apartado de peticiones ciudadanas del Gobierno vasco, censuran que “solo se han planteado tres opciones de distribución del alumnado, descartando desde el inicio la posibilidad de mantener juntos Educación Infantil y Primaria por supuesta falta de espacio”. No obstante, señalan que, tras realizar un análisis “propio” de los planos de públicos, esa opción “sí sería viable”.
En ese sentido, y ya en una carta al director publicada en este periódico, el mismo grupo alega que el hecho de que no se considere válida la opción elegida por ellos, ha generado “una comprensible sensación de engaño y de participación sin valor real”. A ello se suma, a su juicio, “la inquietud ante la posible creación de un macrocentro, con aumento de líneas y matriculación directa desde otros centros en la ESO, lo que supondría perder una escuela pública de barrio, cercana y humana, en favor de un modelo impersonal que puede afectar al bienestar del alumnado”. En ese sentido, apuntan que “no se trata de resistirse al cambio, sino de exigir coherencia, transparencia y respeto”.