No es una huerta exuberante ni un jardín secreto, pero los balcones se han convertido de un tiempo a esta parte en una suerte de vergel doméstico para cada vez más personas en Bilbao.
Tomates, pimientos, fresas, guindillas e incluso aguacates son algunas de las delicatessen que se puede aprender a cultivar en los talleres municipales organizados esta misma semana en las instalaciones de La Perrera, en Sabino Arana.
Estas charlas formativas tienen como objetivo promover la plantación de verduras y hortalizas en los balcones y ventanas y, de paso, buscan sembrar la semillita de la sensibilización entre la ciudadanía “para fomentar la biodiversidad en nuestros domicilios”.
Así han descrito esta iniciativa desde las Áreas de Movilidad y Sostenibilidad y Juventud y Deportes en un primer balance de esta nueva convocatoria de ‘Balcones Comestibles’. Las dos sesiones han completado las plazas ofertadas, han destacado fuentes municipales.
En concreto, las personas participantes han asistido a talleres teórico-prácticos sobre el cultivo de verduras y hortalizas. Entre otras cuestiones han podido adquirir conocimientos sobre cuáles son las plantas más adecuadas para este tipo de espacios, el calendario de siembra, los fertilizantes naturales, o la obtención y conservación de semillas, por ejemplo.
En el segundo de los cursos se han abordado otros aspectos como el relativo al uso de sensores, la optimización del riego, el aprovechamiento de la luz solar.
