Decía este lunes Cristina Fallarás, periodista que ha dado voz a cientos de víctimas de la violencia machista en sus redes y ha destapado el caso Errejon, que el hartazgo es últimamente el sentimiento más manifestado por las mujeres. Cerca de 9.000 personas –según fuentes municipales–, sobre todo mujeres, han salido a las calles de Bilbao para darle la razón y demostrar que no están dispuestas a callar. Este año el Movimiento Feminista de Bilbao ha tomado como propia la proclama de Gisèle Pelicot, instando a que la vergüenza cambie de bando, mientras que las instituciones han puesto el foco en los negacionistas de la violencia machista. Toda reivindicación es poca para atajar esta lacra de forma poliédrica. Pancartas con consignas como “Educa a tu hijo para que no sea un violador” o “Ni golpes que duelan, ni palabras que hieran” han evidenciado que el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres sigue siendo necesario.
La actriz Elisa Mouilaá, que denunció al político de izquierdas Iñigo Errejón por un caso de acoso sexual –evidenciando que el comportamiento de los supuestos aliados también está impregnado por el machismo–, o Gisèle Pelicot, que ha llevado a su marido ante la justicia por haber instado a decenas de hombres a que la violaran sistemáticamente durante diez años, son algunas de las protagonistas involuntarias de un año en el que se ha vuelto a reflejar la importancia de seguir señalando estos delitos. También se debe recordar a quien ya no tiene voz, como Yanely Gonzales, la primera asesinada en Euskadi en 2024 a manos de su pareja. La joven de 31 años fue acuchillada en la vivienda que compartía con su homicida en el barrio bilbaino de Santutxu el pasado mes de septiembre.
"Si no eres la solución, eres el problema". Esta es una de las ideas principales que han querido trasladar desde el Movimiento Feminista de Bilbao. “Denunciamos específicamente la violencia sexual, ya sea en el marco de la pareja o en las calles, porque las denuncias cada vez son más numerosas”, han declarado Irati Sienra y Amanda Verrona, portavoces de la organización, minutos antes de que la marea morada partiera desde Sagrado Corazón al consistorio bilbaino. “Queremos poner sobre la mesa la complicidad entre los hombres, que son los responsables de mantener la cultura de la violación. Ya vale de mirar hacia otro lado”, han denunciado. En ese sentido, han aseverado que está habiendo “un aumento del ataque misógino”, ya que “muchos hombres intentan blanquear su actitud violenta haciéndose pasar por la víctima”.
NEGACIONISMO
Tanto el Gobierno vasco como las diputaciones vascas han puesto este año el foco en el negacionismo de la violencia machista, un problema que preocupa a las instituciones vascas entre otras cuestiones porque se está extendiendo con rapidez, a través de las redes sociales, entre la población más joven. “Te paso el vídeo montándoselo con su novia” o “Aprovecha ahora que va borracha” son ejemplos de frases que pueden escucharse entre chavales de instituto. Natalia, Leire y Naia, jóvenes de 23 años de Abanto-Zierbena, lo han corroborado. “Percibimos un menosprecio a la gravedad del problema por parte de los chicos”, han comentado las jóvenes, quienes han evidenciado que “en redes sociales hay influencers o tiktokers a los que siguen y tienen un discurso de derechas”. Además, han apuntado que los jóvenes advierten que “el movimiento feminista está cogiendo cada vez más peso y sus privilegios se ven amenazados”.
La movilización ha congregado a personas de todas las edades. A unos metros de distancia, Virginia y Merche, dos pensionistas comentaban el asesinato a cuchilladas de una menor de 15 años a manos de un joven de 17 años en Orihuela. “No conozco ni un solo caso en la historia en el que quien haya ostentado la supremacía o el poder lo haya soltado voluntariamente”, han afirmado estas bilbainas que llevan décadas participando en las movilizaciones. “Me acuerdo de las manifestaciones del 8 de marzo en los 70, cuando no éramos más de 20 o 30, y cuando cruzábamos el puente de El Arenal, nos insultaban: ¡Gordas, bolleras, estáis ahí porque no hay quien os follen!”, ha recordado Virginia, antes de decir que “algo” se ha avanzado.
EN OTRAS LOCALIDADES
Además de en Bilbao, otras localidades del territorio han llevado a cabo sus propias movilizaciones. En Gernika, por ejemplo, han denunciado la violencia contra los menores. La proclama elegida por Gernikako Sare Feminista no es ninguna casualidad. “En Gernika, en el último año, ha quedado claro que son muchos quienes ponen el testimonio de la víctima en duda, sobre todo cuando el agresor es conocido en el pueblo”, han manifestado en una clara alusión a la denuncia tramitada por una gernikarra por “un delito continuado de agresión sexual” contra Marío López, exentrenador del club de baloncesto Lointek Gernika. Los ataques se perpetraron, según la denuncia, mientras ella era menor de edad y tenía entre 13 y 16 años. El caso, que despertó gran indignación en la villa foral y en el conjunto de la sociedad vizcaina, será juzgado del 14 al 16 de enero de 2025 en la Audiencia Provincial de Bizkaia.