Con las manos o con tenedor y cuchillo. Para desayunar o para merendar. Hay de tipos diferentes: clásico, de chocolate, de crema y de jamón y queso. Incluso hay quien lo abre por la mitad y lo rellena con mantequilla o mermelada de melocotón o fresa. Sin importar el momento, la clave es la de disfrutar del cruasán, esa especie de bollo de hojaldre en forma de media luna que apetece desde la mañana con el desayuno en alguno de los establecimientos de Bilbao.
Este martes, 30 de enero, es el Día Internacional del Cruasán, la oportunidad perfecta para comer un cruasán que acompañe al café. Entre las opciones que ofrece la capital vizcaina se encuentran algunas de las pastelerías más relevantes de la villa.
PASTELERÍA MARTINA ZURICALDAY
La primera parada obligatoria para disfrutar de un buen cruasán es la pastelería de Martina Zuricalday. Desde 1830 repartiendo cariño entre las y los vecinos de la zona, se pueden probar para acompañar al café cruasanes de chocolate o de almendra.
PASTELERÍA PATXES
En la calle Heros, al dueño del establecimiento hace magia con un producto muy solicitado y tuvo la idea de especializarse en cruasanes rellenos. Hasta la actualidad, las colas por probar uno de los manjares que ofrece han ido en aumento. En gran parte, por el boca a boca.
PASTELERÍA ARRESE
En tercer lugar, Arrese tiene a disposición de los amantes del cruasán varios puntos de venta en la capital vizcaina. Entre ellos se encuentran en Gran Vía o Rodríguez Arias. Aunque también destacan por sus palmeras de chocolate, este martes es el día para cambiarla por un buen cruasán.
PASTELERÍA DON MANUEL
Esta será la última, y no por ello menos importante, parada en la ruta de cruasanes. Después de tres manjares que se pueden degustar en la villa, la pastelería que cierra los lunes arranca su semana con un martes, 30 de enero, envuelto en pleno día internacional del cruasán. El de pistacho de uno de los más destacados de lugar.
