Un abrigo para ama, un pantalón para aita, juguetes para los más pequeños de la familia, una bata de casa para amama, unas zapatillas para aitite, un libro para izeko y una maquinilla de afeitar para osaba. Ideas no faltan para regalar a todos los de casa, sin embargo, en muchas ocasiones, lo que faltan son manos para llevar todas las compras desde las tiendas hasta el domicilio. Por ello muchos vizcainos deciden acercarse a las zonas comerciales de Bilbao en sus coches, lo que supone que tanto los parkings como los aparcamientos a pie de calle estén altamente solicitados en estas fechas prenavideñas.
A las zonas de Indautxu, Abando y Casco Viejo hay que ir, sobre todo los fines de semana, con mucha paciencia y sin prisas. En el caso de los viernes el aparcamiento es de pago tanto en la calle, por el servicio de OTA que funciona hasta las 20.00 horas, como en los diferentes parkings distribuidos en la villa.
Los sábados, sin embargo, la cosa cambia, ya que muchos vizcainos no trabajan y su disponibilidad es mayor. Por las mañanas es más sencillo aparcar porque el servicio de OTA está en funcionamiento hasta las 14.00 horas y eso hace que muchos opten por acudir en transporte público. Por la tarde, en cambio, aquellos que pretenden comprar a lo grande se decantan por usar el coche y dejarlo en un parking, siendo esta la opción más rápida, ya que, aunque el cartel de ocupado cuelgue en prácticamente todos los aparcamientos cubiertos de Bilbao a las 18.00 horas y haya que esperar en una cola a que vayan saliendo, encontrar sitio en las calles del centro resulta misión imposible.
Debido a esto, muchos vizcainos optan por acercarse a la villa en los diferentes transportes públicos, principalmente en metro. Tanto durante la tarde del viernes como en toda la jornada del sábado las diversas estaciones bilbainas se vieron repletas por las personas que acudieron al centro de la ciudad para hacerse con los regalos navideños o acudir a las comidas y cenas de empresa que se celebran tradicionalmente en estas fechas.
No son solo las compras navideñas ni las reuniones sociales las que hacen que el centro de Bilbao se llene tanto de vehículos como de gente. Otra de las principales atracciones que hacen que muchos vizcainos se acerquen a Bilbao los fines de semana por la tarde, copando los aparcamientos, es el encendido de las luces de Navidad, que cada día iluminan las calles desde las 18.00 horas hasta las 22.00 horas.
Además de los árboles decorados por la villa con motivos navideños, las ocho baldosas ubicadas en diferentes puntos de la ciudad, la gran ballena y la bola de Navidad colocadas frente al Ayuntamiento y las figuras de Olentzero y Mari Domingi instaladas en la Plaza de las Mujeres son otros de los grandes atractivos.
Junto con las luces, la gran pista de hielo en El Arenal y los talleres dirigidos a niños y niñas hacen que muchos vizcainos pasen por alto el esperar para aparcar con tal de disfrutar de una tarde navideña en familia.
