Los mercados municipales del Ensanche y Otxarkoaga instalarán paneles solares en sus cubiertas, de forma que puedan autoabastecerse con la energía que se obtenga de las instalaciones. Estas dos plazas bilbainas siguen así la estela del mercado de La Ribera, que ya cuenta con placas similares.

Al igual que los paneles que se instalaron el año pasado en el cementerio de Bilbao y el mercado de La Ribera, con esta nueva iniciativa la entidad pública dependiente del Área de Salud y Consumo del Ayuntamiento Bilbao Zerbitzuak pretende incorporar de forma activa las energías renovables en la economía local productiva y luchar contra el cambio climático. El objetivo es que ambos mercados se conviertan en espacios medioambientalmente sostenibles, integrando energías renovables mediante la implantación de instalaciones eléctricas de generación fotovoltaica.

Entre ambos mercados, las instalaciones sumarán 1.616 metros cuadrados de paneles solares, 900 de ellos en El Ensanche y 716 en el de Otxarkoaga, con la particularidad, en este último caso, de que las placas se instalarán no solo en las cubiertas de las marquesinas ubicadas en la plaza encima del mercado, sino que también se colocarán, de forma vertical, en las fachadas del mercado. En el Ensanche se colocarán en la cubierta dos instalaciones independientes, que suministrarán energía tanto a la planta semisótano, donde está ubicada la plaza de abastos en sí, como al resto de pisos del edificio, que acoge también otros servicios.

Para ello, previamente se realizará un estudio detallado de los recursos solares disponibles -cuáles son las superficies óptimas para ubicar los paneles, por ejemplo- y las posibilidades arquitectónicas de cada edificio, combinando eficiencia energética, máximo aprovechamiento de los espacios útiles y adaptación de la instalación solar a los edificios. En ambos casos, los paneles se tendrán que integrar al diseño de las cubiertas, respetando la arquitectura de los edificios.

Los comerciantes y clientes de ambos equipamientos podrán seguir minuto a minuto el rendimiento de la instalación, ya que pantallas interiores mostrarán la energía que están generando en cada momento los paneles solares.

Las instalaciones funcionarán en modo de autoconsumo con excedente acogida a compensación. Es decir, la energía sobrante pasará a la red consiguiendo así una compensación en la factura de la compañía eléctrica. De este modo, los mercados obtendrán rendimientos del exceso de energía producida, en el caso de que no se necesite para su consumo. El proyecto requiere de una inversión de 258.000 euros, sin IVA, y su ejecución se prolongará cuatro meses.