Como no podía ser de otra manera, el silencio reinó este miércoles en la sala 1 del TSJPV durante el juicio simulado que celebraron los alumnos del colegio Ángeles Custodios de Bilbao. Y es que por el caso que se abordaba, no podía ser de otra manera: un juicio relacionado con el sexting basado en un caso real. 

El alumnado siguió un guion realizado por el magistrado Emilio Lamo y los hechos a juzgar eran el envío de fotos y mensajes íntimos por parte de un menor de la que ahora era su expareja, un tema de máxima actualidad.  

La representación, en la que varios alumnos asumieron los roles de proceso, forma parte de la última fase del programa 'Educar en Justicia', una iniciativa que el Gobierno vasco y el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco para mostrar a los y las más jóvenes qué es y cómo funciona el sistema judicial vasco en la que este año han participado cerca de 1.000 alumnos y alumnas de 54 centros educativos.

Los alumnos y alumnas interpretaron los papeles de jueza, testigos, acusado, peritaje, defensa, víctima y funcionaria de auxilio y, tras la representación, las conciencias se removieron. Eukene Martín señaló tras ver el juicio que “está bien conocer estos casos porque muchas veces cuando tienes confianza con alguien sientes que no va a llegar a más, pero no tienes que confiar nunca al 100% en la otra persona porque no lo conoces del todo y no sabes lo que puede pasar con las cosas que le envías”. 

"Una llamada de atención"

Lucía Villaver, que interpretó el papel de jueza, afirmó que dar a conocer el caso entre los jóvenes “puede funcionar como aviso, como llamada de atención a todas esas personas que piensan que ser menor de edad y tener un teléfono te da una libertad que en realidad no tienes, que todos tus actos tienen consecuencias y es algo que cuanto antes lo sepas, mejor”. 

Jon Rodríguez fue más allá y reflexionó sobre las consecuencias de actos como el que se juzgaba. “Creo que la gente muchas veces no ve las consecuencias de sus actos y hay que tener cuidado con estas cosas porque puede destruir a una persona tanto mentalmente como físicamente. El programa de Educar en Justicia y la representación de este juicio puede ayudar para que la gente sea consciente de sus actos y vayan aprendiendo a cómo se tienen que usar las redes”, relató. 

Y es que esta iniciativa pretende ser “una semilla que luego dé su fruto para que estos jóvenes sean mejores personas, mejores ciudadanos y sean consciente de toda esta realidad”, señalaba Félix Gómez, profesor del colegio Ángeles Custodios de Bilbao. 

"Ser cortafuegos"

El magistrado Emilio Lamo animó a los alumnos y a alumnas tras la representación a “ser cortafuegos”. “Si recibís mensajes de ese estilo, que no tienen por qué afectaros personalmente, pero sí en vuestro entorno a terceras personas, tenéis que ser cortafuegos, tenéis que comunicarlo a vuestro profesor, al centro o a vuestros padres. Siempre va a haber alguien que os va a poder prestar ayuda”, expuso. “De esa forma colaboraréis en que una fiscal de menores tenga conocimiento de lo que ha ocurrido y pueda presentar denuncia y que una juez pueda conocer la causa y condenar a aquellos que está atacando de manera vil a una persona que no se lo merece”, añadió.