BILBAO - El Ayuntamiento de Bilbao se ha hecho eco de una de las peticiones que las asociaciones de mujeres llevan reivindicando desde hace tiempo. Policía Municipal y Ertzai-tza han comenzado a vigilar a los agresores en lugar de a las víctimas, según anunció el concejal de Seguridad Ciudadana, Tomás del Hierro en el pleno celebrado el jueves. Blanca Estella Ruiz, presidenta de la asociación Clara Campoamor que se dedica a la lucha por los derechos de la mujer y de la infancia, se mostró ayer “muy orgullosa de los representantes políticos del Ayuntamiento porque están haciendo lo que no hacen ni la Fiscalía ni los jueces”.
Hace tiempo que las asociaciones reclaman que a la mujer se la proteja y que sea el maltratador quien esté vigilado, pero hasta ahora todas las medidas recaían en el entorno de la víctima, lo que desde muchos ámbitos se consideraba una doble victimización; de ahí que este paso dado desde el Área de Seguridad de Bilbao sea tan relevante.
“Hay una Fiscalía que no acusa, hay un juez que no condena... Por lo tanto, al final hay que vigilarles y ante esto, y sabiendo que son peligrosos, tenemos un Ayuntamiento que es quien lo va a hacer”, valoró ayer Blanca Estrella Ruiz.
Desde la asociación Clara Campoamor se lleva muchos años solicitando no solo esta medida sino también la creación de casas donde estén recluidos los agresores. Según explica Blanca Estrella Ruiz, “se trata de un proyecto que cuando yo estuve en Francia le oí a Nicolás Sarkozy. Él mismo, como presidente de Gobierno, salió a anunciarlo”. Y, de hecho, según explica, “ya se ha abierto en Toulouse un centro de rehabilitación y reinserción para pederastas, maltradores y asesinos. Y eso es lo que queremos”.
Expone que “se habla del derecho a reinsertarse, a rehabilitarse; pues no, nosotras pensamos que se debe cumplir la condena, entendiendo que en España no se cumplen más de 30 años. Y después, si los técnicos dicen que no es reinsertable, que entre en un centro de rehabilitación y con una pulsera vaya a trabajar, al fútbol o donde quiera, pero que tenga que desayunar, comer y cenar en el centro y reciba un tratamiento”.
Prevención Para Blanca Estrella Ruiz, “se trata de una medida que no solo supone un gran avance de cara a la víctima sino también respecto a la prevención”. Se refiere a que “el que ha sido violada o apaleada, ya es víctima; pero es positivo para las víctimas de mañana, de pasado o del futuro y, además, servirá para que la víctima que ha denunciado esté tranquila y sepa que está repaldada para que no se vengue de ella”.
Y es esta doble finalidad la que pone en valor la presidenta de la asociación Clara Campoamor. “Por un lado proteger a las víctimas que se atrevieron a ir a los tribunales a acusar y que luego los tribunales les han dejado en la calle. Y para que otras posibles víctimas no pasen por lo mismo”. Blanca Estrella Ruiz añade que “me siento orgullosa de ser bilbaina en estos momentos”.
El año pasado hubo en Bilbao 119 denuncias por violencia machista y la Policía Local se ocupó de 36 órdenes de protección. En estos momentos, con el acumulado de otros años, hay 100 mujeres que reciben protección policial.
Ante un caso de violencia de género, desde el Área de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Bilbao se interviene en un plazo máximo de diez minutos en coordinación con el Área de Acción Social e Igualdad, Cooperación y Ciudadanía. El servicio de atención para la recogida de denuncias está operativo las 24 del día y se avisa siempre tanto a un abogado como al Servicio Municipal de Urgencias, SMUS. A partir de ahí se tramitan las solicitades y se establecen las medidas policiales de protección.