Hoy Juan Mari Aburto es un eslabón de la cadena de un país. Katea ez da eten, recita como un mantra a lo largo del repaso a la historia de Bilbao a través de las portadas de DEIA. “Katea ez da eten. Unir el Bilbao que fue y el Bilbao que nos viene o, mejor dicho, el que queremos hacer o tener”. Así, hilando su historia personal desde aquel 8 de junio de 1977 cuando nace el primer periódico vasco, el alcalde va avanzando en la historia de una ciudad que recupera la Aste Nagusia como modelo festivo y se ilusiona cuando recuerda al primer alcalde nacionalista que llega al Ayuntamiento de Bilbao. En cuarenta años la villa ha sufrido las inundaciones y ha sido testigo de la aparición del metro que ha vertebrado no solo la ciudad sino también parte del territorio. Han sido años de crecimiento al amparo del Guggenheim y con la implicación de sociedades como Bilbao Ría 2000. Juan Mari Aburto no quiere dejar de soñar porque, y lo ha dicho recientemente, “la ciudad y la ciudadanía que deja soñar, deja de tener vida. Se apaga”. Por eso, el alcalde quiere soñar con nuevos proyectos, para Bilbao alrededor de la ría, con celebraciones que permitan disfrutar de nuevos éxitos del Athletic y con el enriquecimiento personal a través de las relaciones humanas. Estos 40 años de DEIA son también el testigo del chaval que tenía 16 años al alcalde que es hoy. “Tanto DEIA como Bilbao tienen pasado, presente y futuro”, dice.
8 de junio de 1977
Nacimiento del primer periódico vasco, DEIA
El nacimiento de DEIA coincidió con un momento muy ilusionante para todos los vascos. La portada de aquel inicio recogía así el titular: Excarcelación total de los presos políticos vascos. Juan Mari Aburto echa la vista atrás para recordar aquel momento de cambio, de mirar al futuro, “se abría para Euskadi un nuevo tiempo en el que todos podíamos participar. Mucho sufrimiento y la ilusión por construir un país en paz”. A la vez que dice esto piensa que también fue seguramente “la gran decepción” porque “aquella excarcelación, en aquel momento, no supuso un tiempo nuevo para otros porque hubo quienes decidieron seguir utilizando la violencia y el terror y seguir sumiendo al país en años de tremenda oscuridad”.
Juan Mari Aburto estaba estudiando en el colegio la Salle de Deusto. Fue el año en el que conoció “a una mujer extraordinaria, Arantza, mi compañera de viaje. Eran años donde todo fluía a borbotones. De mucha convulsión política y mucha participación”. Tenía 16 años y ya entonces se movía en determinados grupos en Deusto en movimientos parroquiales y participó en muchos de los movimientos que surgían “con ilusión y mucha fuerza”.
20 de agosto de 1978
La fiesta popular nace con Aste Nagusia
Se recupera la Aste Nagusia como modelo festivo fundamentado en la participación popular. Para Aburto se abre un nuevo tiempo. “Bilbao que había sido toros y teatro fundamentalmente en toda la época de la dictadura, se abre a un nuevo mundo en el que la participación popular es fundamental en unas fiestas conceptuadas de una manera diferente, sin renunciar a los toros y el teatro”.
Recuerda que era el momento en el que empezaba a salir. “Y también que volvimos de Isaba de un campamento de verano extraordinario y una de las quedadas de aquellos que habíamos estado y algunos de los monitores de hermanos de La Salle fue precisamente en El Arenal para disfrutar de aquella noche festiva. Lo pasamos muy bien hasta bastante tarde y recuerdo como un momento de exaltación cuando todos los recuerdos del verano, de lo vivido, se juntaban allí en ese Arenal bilbaino”. Vivía la pasión y la frescura de la juventud.
20 de abril de 1979
Castañares, primer alcalde nacionalista
“Esta portada me produce emoción porque refleja la recuperación de las alcaldías de manera democrática. Era la primera vez para mí que eso ocurría. Jon Castañares nos ha dejado, pero a José Ángel Cuerda todavía tuve ocasión de saludarle en el concierto de Juanjo Mena y está extraordinario, con las mismas ideas que siempre ha manejado”. Aburto recuerda el mandato de Jon Castañares, “yo era joven pero recuerdo que el Athletic ganó la primera liga. Y todavía me estoy viendo aquí debajo del Ayuntamiento celebrándolo”. Y rememora, “entonces sonaron aquellos primeros gritos de Ari ari ari Clemente lehendakari. Ahora como alcalde de Bilbao me evoca ese día del 13 de junio en el que yo tomo posesión de alcalde de Bilbao y soy parte de la cadena. Katea ez da eten. Soy un eslabón de esta cadena”. Tenía entonces 18 años. Fue el año en el que empezó la carrera. “Y, fue también un año de transición para mí porque empecé la carrera de Derecho en Deusto”. Igual que políticamente era una nueva era la de la transición, para Aburto también comenzó una nueva etapa, la de la universidad, donde uno ve más su futuro como persona más adulta. “Ahora que veo estas portadas tengo un grandísimo recuerdo por ese 13 de junio de 2015 que me evoca ese 30 de abril de 1979 en el que dos alcaldes nacionalistas eran alcaldes de Bilbao y Vitoria y yo he tenido la enorme fortuna de seguir esa estela”.
20 de agosto de 1979
Referéndum sobre el Estatuto de Autonomía
Recuerda que fue su primera votación. “Con una enorme ilusión y votando sí a aquel Estatuto que seguía siendo una puerta a la construcción del país en el que creo que es Euskadi. Un país abierto al mundo, a la gente, y en el que había una gran ilusión por el desarrollo de nuestras ilusiones, nuestras cotas de autogobierno y en el fondo para vivir mejor”. Había cambiado el concepto de las fiestas de Bilbao y la relación con las comparsas había ido variando. Aprovecha para reseñar que “es muy importante convencernos de que tenemos que tener un único objetivo. Festetan jai y nada más. Las fiestas son para el disfrute de la gente que viene a Bilbao y de la que está. En fiestas sobra la diatriba política, las agresiones sexistas, los comportamientos incívicos. Es muy importante que sepamos preservar el espíritu festivo”.
1 de mayo de 1983
Gana el Athletic y se reinaugura el funicular
“Empezamos perdiendo y acabamos ganando, creo que 1-5. Era un momento muy especial y estoy recordando ahora mismo la imagen de una persona muy querida para mí, Piru Gainza, bailando en el vestuario después del partido. Había sido un gran logro”. La generación de Aburto no había podido disfrutar del título de liga por parte del Athletic. “Habíamos visto las finales contra el Elche y el Castellón que habíamos ganado, habíamos perdido la final con el Betis con el penalti que Esnaola metió. Y el penalti fallado por Dani. No habíamos visto lo que era ganar una liga, que Bizkaia se echara a la calle para celebrarlo y tuvimos esa oportunidad. Esa gran suerte que ojalá algún día pueda volver porque aquello fue mucho más que un triunfo deportivo al igual que el Athletic es mucho más que un club deportivo. Es parte de la identidad de un pueblo y un símbolo. Me encantaría poder ver que mis hijos, las nuevas generaciones, pudieran disfrutar de un día como ese”.
Coincide en la misma fecha con la reinauguración de un transporte centenario como es el funicular de Artxanda que Aburto recuerda bien. “Fundamentalmente subíamos a patinar y también recuerdo el domingo por la mañana ir con aita y ama a comer rabas al Antón. Esos recuerdos están frescos en mi memoria. El funi es parte de mi tradición y de nuestra historia y hoy cien años después sigue estando presente en la memoria, pero también en la vida”.
4 mayo de 1983
Primer recibimiento al Athletic en Bilbao
Se acuerda perfectamente de esa fecha e incluso de que en el vídeo que hizo el Athletic entonces hay un momento que se le ve justo delante de la Universidad de Deusto.
“Me acuerdo mucho de aquellos años, incluso teníamos clase de Derecho de Trabajo con el profesor Manuel María Zorrilla, posteriormente presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, y pusimos en la pizarra aquello de Hoy no hay clase. Athletic txapeldun. Nos fuimos a dar una vuelta y a celebrarlo. Una demostración como la que se vio en ese momento es inigualable”, señala el alcalde de Bilbao.
28 agosto de 1983
El agua arrasa Euskadi, inundaciones
El alcalde no estaba en Bilbao en ese momento, aquel verano estaba haciendo la mili en Cádiz. “Las imágenes que veíamos eran horrorosas. Tardé varios días en hablar con mis aitas que estaban entonces en Bakio y lo que se oía es que Bakio prácticamente había desaparecido, y ver los vagones de tren por la ría, fue espeluznante”. También, “ ver la imagen del alcalde Robles con aquellas botas por el Casco Viejo implicándose de lleno en salir de esa situación. Fue una manera de demostrar la fuerza que tiene Bilbao para superar situaciones de extrema dificultad. Las inundaciones supusieron también un cambio de concepto en lo que supuso el Casco Viejo”.
8 noviembre de 1992
Creación de la sociedad Bilbao Ría 2000
Se crea Bilbao Ría 2000 con el objetivo de la transformación de Bilbao. “Esta portada me evoca hacer justicia a una persona que no se le ha hecho y se la merece y que es Josu Ortuondo. Fue un magnífico alcalde de Bilbao y la concepción que él tuvo de Bilbao, luego fue Iñaki Azkuna, el extraordinario Iñaki, quien lo pudo llevar a efecto. Pero nos hemos quedado muchas veces con esa imagen”. Y Aburto recuerda que somos eslabones de una cadena y en solitario una época u otra no tiene sentido. Sin duda el Bilbao de hoy es deudor de la concepción que tuvo Ortuondo en la cabeza y el hecho de que bajo su mandato se constituyera Bilbao Ría 2000 me evoca lo importante que es la política del acuerdo, la gente quiere que busquemos acuerdos. Son siempre valiosos”. Por eso, Juan Mari Aburto pone en valor que las instituciones trabajemos juntas. Ayuntamiento de Bilbao, Gobierno vasco, administración del Estado... “todos juntos en pos de buscar las mejores infraestructuras”. Aburto no conocía a Josu Ortuondo personalmente. “Era el alcalde de Bilbao y era una persona afiliada al PNV en la misma organización en la que yo estaba. Y al batzoki de Deusto se le llamaba cabo Cañaveral porque de allí salieron Josu Ortuondo, Javier Atutxa, Josu Bergara, pero no tenía esa relación estrecha”. En aquel año, Aburto formaba parte del equipo de Juan Mari Atutxa, tenía 31 años y vivía un momento extraordinariamente ilusionante aunque también un momento muy duro en el que se cometieron muchos atentados y muchas personas fallecieron. “Siempre digo que lo que espero llevarme de estos años en los que me toca pasar por distintas instituciones es salir muy rico, pero en relaciones personales. Hay personas que se han ido cruzando en mi vida, y siempre cito a tres, que son Juan Mari Atutxa, José Luis Bilbao e Iñigo Urkullu. Son referentes para mí en lo político y, lo más importante, en lo personal. Tienen unos valores extraordinarios y han puesto su vida a disposición de la comunidad. Son como un espejo en el que mirarme. Pero no me olvido de toda la gente con la que he compartido equipo, aquellos en los que me ha tocado participar y en los que posteriormente me ha tocado hacer”. Porque el alcalde es un hombre que cree que si algo se puede hacer en esta vida pública es tejer relaciones y “creo que lo he conseguido hacer y trato de hacerlo”.
12 noviembre de 1995
Puesta en marcha del metro de Bilbao
Recuerda bien la inauguración del metro de Bilbao. “Hacía un año que había vuelto de mi primera responsabilidad pública en el gobierno a mi primera responsabilidad pública como director de Régimen Jurídico y Función Pública en la Diputación de Bizkaia y pude participar en la puesta en marcha de aquella infraestructura que cambió la vertebración del territorio y todo lo que supuso para la movilidad de las personas en general y de las personas con movilidad reducida en particular. Fue un gran hito”.
18 octubre de 1997
Inauguración del Guggenheim y ELA
Es la presentación del museo Guggenheim en sociedad. Y coincide con que ELA reúne en Gernika a los abertzales. “¿Qué tiempos aquellos es lo que me evoca esta portada? Qué tiempos en los que podíamos ir de la mano con ELA para construir país de diferente forma social y políticamente. ELA es una institución importante en este país. Pero creo que en estos momentos es muy difícil contar aquel modelo de entendimiento, es algo a recuperar”. En aquellos años aunque se conoce más la faceta social de Aburto sus responsabilidades tuvieron que ver con las relaciones laborales y ”mis relaciones con ELA fueron constantes”. Así, “recuerda que tanto José Luis Bilbao como yo nos implicamos mucho para sacar adelante acuerdos que tenían que ver con un marco. Fueron años extraordinarios donde conocí gente magnífica”. Para Aburto, aquella ELA buscaba la política del entendimiento y “hoy busca más la política de la confrontación”. De la política de la colaboración podemos encontrar acuerdos. En lo personal Aburto tenía ya sus dos hijos y al cumplir diez años de casados había realizado su primer viaje “un poco serio” a Praga y a Budapest.
21 julio de 2013
Certificación de que la ría esta saneada
El Guggenheim supuso un gran cambio para Bilbao, pero su éxito está aliado también, de alguna manera, a su ubicación en la ría. “Recuerdo que antes no tenía ningún atractivo pasear por el entorno de la ría, porque olía. Recuerdo aquellas tardes de niño volviendo de la playa para ir a la cervecera y percibir ese olor desagradable. Hoy es un lugar donde la ría fluye y el ocio es posible, es un lugar donde ocurren cosas positivas para Bilbao. Es un orgullo”. Precisamente está convencido de que “Vamos a recuperar la ría totalmente incluso para el baño. Cuando hablamos de la playa de Bilbao es un concepto que entra dentro de nuestros planes de presente y futuro”.
13 junio de 2015
Alcalde de Bilbao, un sueño cumplido
El 13 de junio de 2015 Juan Mari Aburto cumplía un sueño. “Un orgullo que jamás hubiera pensado. Una enorme alegría y a la vez una enorme responsabilidad”. Por primera vez después de diversas experiencias en las instituciones, Aburto se ve a la cabeza de una de ellas. “Me produce una gran alegría pero también una gran responsabilidad”. Desde aquel día, es el alcalde de Bilbao.