BILBAO. "El hecho de que haya dos puentes, sumado a que la semana comercial desaparezca, porque las empresas no viajan, hace que nuestras previsiones sean bastante malas. Entre el 2 y el 11 de diciembre tenemos un día por encima del 55% de ocupación y el resto oscila entre el 30% y el 48%", ha señalado.

En este sentido, ha explicado que "quien tiene puente ya lo tiene programado" y la coincidencia de dos días festivos en la misma semana "hace que se anule la semana comercial, ya que las empresas dejan los encuentros profesionales para la semana siguiente".

El representante de la asociación, que reúne a 25 hoteles del Bilbao metropolitano, ha destacado que para la semana próxima hay habitaciones entre sus establecimientos asociados por 49, 50 ó 60 euros, pero ha lamentado que estos precios reducidos "no parece que vayan a animar demasiado" a los posibles clientes.

"AÑO MUY BUENO"

No obstante, Díaz-Munío ha destacado que el balance de 2016 es "muy bueno" para el sector hotelero bilbaíno que, a falta del cierre del año, ha obtenido, según sus cálculos, un aumento en la facturación y en la ocupación media por encima del 10% con respecto a 2015.

"El 2016 ha sido un año muy bueno. No podemos decir otra cosa, a pesar de que la semana va a ser mala", ha indicado, para recordar que tradicionalmente diciembre es un mes "flojo" para los hoteles bilbaínos y el hecho de que los festivos de la Constitución y la Inmaculada hayan caído en martes y jueves no ha ayudado.

El presidente de Destino Bilbao ha manifestado que el sector empezó "bien" el año y el verano ha sido "excepcional". "Hemos podido vender a precios que hacía años que no hacíamos. La gran preocupación es el precio medio por habitación, que en esta ciudad durante muchos años ha estado por los suelos y mejorar el precio medio es una labor ardua. Este año hemos conseguido que mejoraran los precios medios. A ver si se mantienen", ha agregado.

De cara a los próximos meses, Díaz-Munío ha reconocido que los meses de diciembre, enero y febrero son "fríos" para el sector hotelero bilbaíno. "Es complicado, los eventos que se programan son muy puntuales y es difícil atraerlos a la ciudad para estas fechas. Cualquier evento, congreso o presentación de producto intenta garantizarse un poco el buen tiempo, por lo que es difícil convencer al organizador para que lo haga en enero o febrero, aunque es muchísimo más económico en esas fechas", ha indicado.