Bilbao - Por fin. Después de casi tres años de lucir una hermosa visera que evita que probables desprendimientos de la fachada golpeen a los transeúntes, el edificio de la estación de Abando será remodelado íntegramente en sus paredes exteriores. Unos trabajos que Adif, el ente dependiente del Ministerio de Fomento que gestiona las infraestructuras ferroviarias que dependen del Estado, va a aprovechar también para mejorar la accesibilidad al singular edificio. Un emplazamiento de transporte y ocio por el que pasan a diario más de 10.000 personas y que con las obras verán modificadas sus costumbres.

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