Bilbao - La Hacienda vizcaina ha comenzado una campaña para controlar que los establecimientos comerciales emiten las facturas correspondientes. Inspectores forales empezaron a recorrer ayer locales de hostelería, restauración y otros sectores para comprobar in situ que se expiden las facturas a los clientes, una práctica que es no solo una obligación tributaria sino que es también una garantía para que los ciudadanos puedan realizar posteriormente reclamaciones. Los responsables de los establecimientos que no cumplan con esta práctica se enfrentarán a multas de hasta 600 euros.

La campaña de control de la emisión de facturas que dio comienzo ayer se encuadra dentro del Plan de Lucha contra el Fraude aprobado por el departamento de Hacienda de la Diputación para este año 2015. En la práctica, el control para que todos los establecimientos comerciales emitan facturas se realizará a través de visitas de inspectores, que comprobarán in situ que todos los locales cumplen con las obligaciones fiscales. Desde ayer, los trabajadores de Hacienda recorrerán locales de los sectores de hostelería, restauración y otros establecimientos comerciales del territorio, vigilando la emisión de facturas tanto de servicios como de ventas.

Los inspectores controlarán y documentarán todas aquellas circunstancias que observen durante su visita, tanto si se cumple espontáneamente con la citada obligación como si no se cumple. En aquellos supuestos en que no se haya expedido factura, se procederá a la imposición de las sanciones correspondientes que serán, como mínimo, de 600 euros.

Desde la Hacienda vizcaina se recordó ayer que la emisión de facturas no es solo una obligación tributaria, que permite un mejor control de los ingresos obtenidos por los empresarios, sino también es un derecho que tiene la ciudadanía para poder efectuar posteriormente las reclamaciones oportunas. Por ello, la Diputación anima a todos los ciudadanos a exigir la factura cuando realicen sus compras, para poder reclamar en caso de tener algún problema, y contribuir además a combatir el fraude fiscal en el territorio.

Tiques y registradoras

La lucha contra el fraude sigue siendo una de las prioridades del departamento foral de Hacienda. Este año, además de comprobar que todos los establecimientos comerciales emiten facturas, también se establecerá otra nueva línea de control sobre los sistemas informáticos más cercanos al consumidor final, sobre todo en las cajas registradoras de bares, restaurantes, comercios minoristas...

En este sentido, se realizará también una campaña especial de control de la utilización de las máquinas registradoras por parte de estas empresas, así como de la correcta expedición de los tiques a que están obligados. - A. Atxutegi