BILBAO. La pequeña Noruega, como se conoce al barrio de Olabeaga, ha comenzado un proceso de rehabilitación de sus viviendas que limpiará la cara de sus edificios, mejorará sus accesos y hará la vida de sus vecinos más habitable. De los 78 edificios que conforman el barrio, 37 van a ser rehabilitados. Las obras de mejora ya han comenzado en las casas llamadas de Pénjamo, en concreto entre los números 35 y 31 que se encuentran junto al muelle.

Olabeaga ha comenzado un proceso de rehabilitación que le consolidará como barrio en los próximos años. La incertidumbre que han vivido sus vecinos la última década, desde que los nuevos accesos cuestionaron la continuidad de sus casas, había sumido a sus habitantes en una situación dudosa por lo que no se atrevían a hacer inversiones en sus casas ante el temor de que fueran destruidas. Esta situación, poco a poco, había terminado por deteriorar la zona. Pero Olabeaga no solo no va a desaparecer sino que además ha iniciado una limpieza de cara que dignificará sus viviendas y mejorará la vida de los 1.200 vecinos que habitan esta zona de gran solera de Bilbao. Aún tendrán que pasar cinco años para que la pequeña Noruega cambie su aspecto pero ya se están dando los primeros pasos.

El Ayuntamiento, a través de Surbisa, ha solicitado al Gobierno vasco que declare Olabeaga zona de rehabilitación integrada, lo que permitiría a sus vecinos disfrutar de ayudas de hasta un 35% de la inversión realizada. Según explica la directora de Surbisa, Marta Ibarbia, entidad que está tutelando estas rehabilitaciones, "ya se ha presentado al Gobierno vasco el informe correspondiente para que pueda ser declarada zona especial y así los vecinos accedan a más ayudas". Según Ibarbia, el nuevo Gobierno vasco ha asumido ya las competencias, por lo que es de esperar que la resolución llegue este mismo mes.

Surbisa elaboró hace dos años un estudio para la localización de ámbitos y áreas de rehabilitación en el que se apuntaban 70 nuevas actuación en la ciudad. José Luis Sabas, presidente de Surbisa, planteó ampliar los ámbitos de actuación y decidió empezar por Olabeaga donde se encuentran edificios de más de 50 años, sin ascensor y con la necesidad evidente de mejoras. Además, muchas de ellas están habitadas por gente mayor, más vulnerable.

Talleres de trabajo

Así, en 2011 Surbisa realizó un estudio de las viviendas y un asesoramiento técnico a los vecinos sobre las obras, su coste y la tramitación de las ayudas. Por su parte, la asociación vecinal Olabeaga Bizirik también trasladó al Consistorio la necesidad de un cambio para el barrio, fruto de las reflexiones que realizaron en talleres de trabajo para aportar propuestas de reforma.

En el ámbito de Olabeaga hay 78 edificios de los que han sido seleccionados para la rehabilitación 37, que son los que tienen más de 50 años. De manera más intensa, los trabajos han comenzado en los edificios 26, 27 y 28. En los bloques 24 y 25 se hará una parte de las fachadas y quedarán los números 29 y 30.

La rehabilitación de los edificios tutelada por Surbisa irá acompañada de la reforma de los espacios comunes, de la mano del Área de Obras y Servicios. Entre las peticiones de los vecinos que fueron recogidas en un documento que elaboró el área se encuentra la recuperación de las antiguas vías, una zona que se transformará en zona verde. Una de las peticiones precisamente era acondicionar el vial que parte del antiguo gaztetxe y desde ahí, a través de la antigua vía ferroviaria, recuperar un vial verde que comunique con el Sagrado Corazón. Los vecinos confían en que en noviembre comiencen los trabajos de limpieza y acondicionamiento del túnel de Adif, en la entrada del barrio, y se proceda a ensanchar la carretera, con lo que se ganará en accesibilidad, una de las carencias de Olabeaga.

Mejora del alumbrado, ensanchamiento de aceras y nuevos espacios de estancia completan varios proyectos de rehabilitación en este pequeño barrio que hasta hace muy poco tiempo ha vivido fuera de ordenación, con lo que los vecinos no se atrevían a realizar ninguna reparación.

A diferencia de años anteriores, Olabeaga ya no tiene problemas de ocupaciones. Los vecinos señalan a este respecto que desde el Área de Seguridad Ciudadana cada vez que han percibido la ocupación de algún edificio vacío que podía generar problemas de inseguridad se ha avisado y los responsables municipales han actuado inmediatamente.