Bilbao. Solo ha pasado una semana pero es tiempo suficiente para dar pistas de por dónde se va a desarrollar en los próximos meses la movilidad de entrada y salida a Bilbao. La apertura hace siete días de los nuevos accesos a Bilbao ha supuesto un revulsivo para el tráfico de entrada y salida a la ciudad. Una circulación rodada que se ha demostrado más problemática en la trama urbana que en la estrenada conexión que llega de la autopista A-8, y que ha sido comentario continuo de bilbainos y visitantes.
El sábado, día de estreno con atascos y retenciones lógicas, se vio agravado por la irrupción de dos transportes especiales y despistes por doquier. El domingo, vistos algunos defectos, ya se empezó a tomar medidas para resolverlos, y hubo que registrar el primer accidente en los túneles a última hora de la tarde. Un fin de semana aciago que auguraba un lunes de debacle debido a la actividad habitual de un primer día laborable con los accesos sustitutos del viejo scalextric de Sabino Arana. No fue así. En las horas punta y durante el resto de la jornada el tráfico fue denso pero sin las caravanas ni las retenciones que los más agoreros anunciaban. Una situación de bonanza que se ha ido repitiendo durante el resto de la semana apoyada por una fuerte presencia de Policía Municipal en la calle Zunzunegi.
Reordenación de los accesos La diputada de Obras Públicas y Transportes, Itziar Garamendi, asegura que "esta semana hemos visto cómo los accesos de San Mamés han ido asumiendo el tráfico" y consideró que "se ha ido reordenando el tráfico tanto en la entrada como en las salidas" en el resto de los accesos de la capital. Asier Abaunza, concejal de Circulación y Transportes, también ha visto un cambio pero no quiere tirar las campanas al vuelo. "Estoy contento por cómo ha ido esta semana pero hay que seguir siendo prudente, todavía es poco tiempo y habrá que esperar como mínimo un mes para ver que esta tendencia de normalidad se consolida". Considera que "los hábitos de los conductores no se cambian en cuatro días".
Aunque al principio de semana el tráfico de salida por San Mamés era menor que el de llegada, al final la media con los datos de sábado 18 a jueves 24 equilibran ambos flujos en poco más de 23.000 vehículos diarios. Una cifra igualada también en las entradas con respecto a Sabino Arana pero que es más baja en dirección a la autopista. Son algo más de 3.000 vehículos de media lo que diferencian de salida al viejo y el nuevo acceso. Los conductores se han buscado otras vías de escape temiendo quizás que los primeros atascos que se registraron el sábado de estreno se reprodujeran el resto de las jornadas. La reabierta entrada a Zabalburu por Juan de Garai para los vehículos procedentes de Cantabria ha cumplido las previsiones y ha asumido un nuevo papel protagonista en detrimento de su acceso colindante, el itinerario por Miribilla, que ha visto cómo disminuía su tráfico. El primero ha pasado de acoger una media de 9.190 vehículos entrando cada día a los 12.764 registrados desde el sábado 18 al jueves 23. Los datos recogidos por la Diputación, diferentes en sus fórmulas de conteo y ubicación de puntos geográficos, avalan el incipiente cambio de costumbres.
Los nuevos accesos a Bilbao por San Mamés han absorbido durante la primera semana laboral el tránsito de 272.143 vehículos; entre lunes y viernes fueron 132.970 los conductores que los utilizaron para entrar en Bilbao y 139.173 los que la usaron para salir. Contrastados estos datos con los de 2012 en los accesos por Sabino Arana, se constata que los nuevos accesos por San Mamés han experimentado un descenso en su uso, si bien "este no ha sido significativo". En 2012 utilizaron el viaducto un promedio diario de 29.779 vehículos para entrar en Bilbao y 29.390 para salir; mientras que este año lo han hecho un promedio diario de 26.594 y 27.835. En cualquier caso, los nuevos accesos a San Mamés son los más utilizados, por encima de Juan de Garai, la Variante Este, Santo Domingo, Enekuri y los túneles de Artxanda, cuyos promedios esta semana no superan a los de los nuevos accesos.