Bilbao. Color, humor, música y erotismo. Todo eso se podrá ver en la sala Cúpula del Campos Elíseos, donde se presentará desde hoy Cabaret Burlesque, un espectáculo poco habitual en Bilbao. "El cabaret había caído en el olvido, pero repunta en tiempos de crisis, porque hace disfrutar al público sin tener que pensar", comenta Nacho Embid, director de Cabaret Burlesque. El grupo formado por diez artistas procedentes de campos como el teatro, la danza o el circo, realizará durante este fin de semana su primera toma de contacto con el público de la villa en lo que será la antesala a su actuación en Aste Nagusia. Bilbao será la primera ciudad en la que recalará este grupo tras Zaragoza, lugar donde hacen sus espectáculos habitualmente. El show se presentará en cuatro pases: a las 16.30 horas se hará Café Pólvora, a las 19.30 se ofrecerá Cabaret Tarde, a las 22.30 horas se escenificará Cena Cabaret que a las 23.30 incorporará Copa Cabaret y para finalizar a las 01.30 horas se realizará la sesión Golfa.

Esta obra pertenece al burlesque, subgénero de éxito en la década de los 20 y 30. "El burlesque presenta más color, joyas, glamour y unos desnudos más elegantes que el cabaret tradicional", asegura Embid. Los desnudos serán parte importante del espectáculo, pero tratados siempre con elegancia. "No se verán desnudos ofensivos ni hirientes, serán bellos, humorísticos y artísticos", asegura el director aragonés.

El espectáculo presenta un programa variable con actuaciones más cortas como Café Pólvora que tendrá una duración de 50 minutos, la mitad que el resto de pases. La flexibilidad de este cabaret es tal que, en función del perfil de público asistente, la obra se realizará sin desnudos, con desnudos femeninos o masculinos. "La obra está dirigida a un público de entre 18 y 70 años", señala Embid. Para el espectáculo Cabaret Burlesque, el aforo Cúpula será de 200 personas, lo que creará un ambiente más íntimo que animará a participar al espectador. "Es un cabaret muy divertido porque el público participa en él", afirma Nacho Embid. Esa es una de las señas de identidad de esta obra, junto a la vivacidad, la rapidez y belleza de los números que integran el espectáculo. Luz, color, plumas y purpurina brillarán con luz propia hasta el 5 de septiembre en La Bombonera de Bertendona.