bilbao. La futura residencia Reina de la Paz en Sarriko será menos ambiciosa de lo que en principio se había propuesto BBK. Sin embargo, mantendrá su compromiso de contar, al menos, con el mismo número de plazas que ya tenía en el edificio que se está derribando, para realojar a los usuarios que se encontraban en la residencia, y atenderá, además, a jóvenes y personas con discapacidades físicas en apartamentos.
El Ayuntamiento de Bilbao ha probado el estudio de detalle presentado por la ingeniería Idom, que reduce las 12 alturas máximas previstas en el proyecto inicial a un máximo de siete y contempla, además, un espacio de uso público que conectará con la plaza de Sarriko.
La junta de gobierno de Bilbao aprobó el pasado 11 de febrero el estudio de detalle presentado por la ingeniería Idom para la construcción de la residencia Reina de la Paz situada en la Avenida Lehendakari Aguirre, en Sarriko. Será un proyecto menos ambicioso que el presentado en un principio y en el que se proyectaban doce alturas máximas, aunque, al tratarse de un edificio en U, el complejo disponía de diferentes alturas. La residencia tampoco contará con 675 plazas. Finalmente, se quedará prácticamente con las mismas que tenía el edificio original, esto es, 350.
Según fuentes de BBK, "se había presentado un proyecto de máximos y ahora lo que se ha aprobado por la junta de gobierno es algo más modesto, adaptándose a las líneas que marca el Plan General para una parcela de estas características".
El estudio se aprobará en el pleno municipal de mayo y, a partir de ese momento, BBK tendrá que presentar el proyecto constructivo en el que se detalle con precisión el número de habitaciones y apartamentos, así como la tipología del edificio. Según las fuentes consultadas, el derribo concluirá prácticamente en su totalidad para el mes de junio. Para esa fecha, Idom ya tendrá preparado el proyecto y, tras solicitar la licencia de obras, podría iniciarse la construcción del nuevo edificio.
Por otra parte, aunque existe cierto retraso con respecto a las fechas iniciales -debido fundamentalmente a que se han buscado fuentes de financiación-, es posible que ahora, al tratarse de un edificio más modesto, tanto los costes como los plazos puedan acortarse y recuperar así el tiempo perdido en las previsiones del proyecto inicial.
Siete plantas máximo Así, el nuevo Centro BBK Sarriko se destinará a servicios sociales residenciales para la tercera edad, respondiendo a las tipologías de residencia y apartamentos tutelados para mayores, así como a apartamentos para jóvenes. El centro tendrá un máximo de siete plantas, según el estudio de detalle: baja + 7, una más de las permitidas en el PGOU. El incremento de esta altura se justifica, según el documento aprobado, por la mejora que supone en relación con el entorno actual, ya que se reducen sustancialmente las alturas respecto a la edificación que existe, se amplía el espacio público junto a las aceras de la calle Pintores Arrue y se aporta una mayor amplitud espacial en el entorno frente a la plaza de Sarriko. El incremento de alturas, en todo caso, se compensa con decrementos en otras zonas de la edificación de forma que no supera el techo real máximo edificable sobre rasante.
El estudio presentado permite además que se genere un espacio central abierto parcialmente hacia la plaza, dentro de las alineaciones máximas, con el fin de permitir una conexión física y visual entre el edificio y la plaza Sarriko.
El complejo previsto inicialmente por BBK para construir en la parcela que ocupaba la residencia Reina de la Paz pretendía duplicar el número de plazas de los 350 que tenía hasta 675, lo que le permitía alojar a los usuarios que tenía tanto en habitaciones de uso individual como doble. El aprovechamiento máximo de la parcela con un edificio en forma de U planteaba ampliar las posibilidades de uso a otros colectivos y para ello esperaba disponer de 275 habitaciones de 28 y 43 metros cuadrados de uso individual y de pareja para mayores y personas con discapacidades.
El estudio previo concluía que los 6.700 metros cuadrados de servicios comunes del nuevo complejo residencial podrían ser ocupados por comedores, salas de estar, salas de actividades y salas ocupaciones, un área sanitaria con consulta, botiquín, peluquería, gimnasio y farmacia, así como lavandería, txoko y apartamento para residentes.
El plazo de construcción eran 38 meses y el presupuesto 50 millones de euros. Ahora, el recorte en el volumen puede diminuir plazos pero se garantiza que habrá plazas suficientes para realojar a los usuarios que ya se encontraban en el Reina de la Paz y se mantiene la propuesta de construir apartamentos para mayores y jóvenes.