BILBAO. El portavoz del PSE en el Ayuntamiento de Bilbao, Txema Oleaga, volvió a cuestionar ayer el modelo urbanístico de Bilbao, en este caso utilizando como pretexto el proyecto del IMQ para dotar a Bilbao de un clínica privada de última generación. El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, defendió sin ningún tipo de reservas la instalación de una clínica del IMQ en Zorrotzaurre, así como la recalificación de equipamiento privado a residencial del edificio donde actualmente se ubica el centro doctor San Sebastián de Deusto de la misma aseguradora. La discusión acabó en un agrio debate que escenificó el desafecto que existe entre Azkuna y Oleaga. "Espero que no tenga la cara de dar codazos dentro de unos años para salir en la foto de la inauguración de la futura clínica", le reprochó Azkuna a Oleaga.
Txema Oleaga se quedó sólo. No sólo el equipo de Gobierno municipal, también el PP resaltaron las virtudes de que una clínica como el IMQ decida instalarse en Zorro-tzaurre, lo que a su vez contribuirá a impulsar este proyecto de regeneración. PNV-EB y PP dieron el visto bueno a la propuesta inicial de modificación del Plan General de Ordenación Urbana para recalificar de equipamiento privado a residencial, el ámbito en el que se ubica la clínica Vicente San Sebastián, a pesar de las interrogantes que planteó el PSE.
El cambio aprobado permitirá construir al IMQ 117 viviendas, cuyas plusvalías revertirán en el nuevo centro. Sin embargo, para el PSE, es necesario saber si ese uso patrimonial es "de interés público". Txema Oleaga pidió al Gobierno municipal que clarifique si está "debidamente reinvertido todo lo que va a ganar de más el propietario de los suelos y si el incremento patrimonial que se va a dar responde a un interés público o no".
Oleaga criticó que se esté haciendo "urbanismo a la carta, al servicio de una empresa privada" y que PNV y EB "perviertan el Plan General, poniéndolo al servicio de intereses privados".
Salir en la foto La respuesta del alcalde Iñaki Azkuna no ocultó en ningún momento el enfado que le produjo la intervención de Txema Oleaga. En primer lugar se negó a dar más información a los socialistas, "por la falta de lealtad que han demostrado. Todo de lo que se les informan se lo cuentan después a un medio de comunicación". Pero, además, recordó a Oleaga que "en la celebración de los 75 años del IMQ dio codazos para salir en la foto y aunque yo no se lo voy a prohibir debería de darle vergüenza decir lo que dice y después dar codazos para salir en las fotos".
Azkuna dijo que el Ayuntamiento "ayudará a cualquier interés privado o público que sea bueno para Bilbao". Y, en este sentido destacó que el IMQ, creará "empleo y riqueza y ya es hora de crear una clínica de postín y categoría" y hay que "apoyar a las empresas que quieren traer riqueza a Bilbao".
Recalificaciones honestas Azkuna aseguró que las recalificaciones "honestamente utilizadas son un recurso extraordinario y un arma legal que se va a seguir utilizando. Cuando no se hace así los ayuntamientos acaban en la cárcel". Por su parte, la delegada de Urbanismo, Julia Madrazo, dijo que se "siembra para recoger", lo que hará que en 2012 una empresa más en Bilbao sea una realidad, una clínica que "generará 500 empleos y dinamizará el entorno".
Julia Madrazo aseguró que el "expediente es claro como el agua clara" por lo que no entendió que Oleaga siembra dudas sobre este asunto. "Si hablamos de urbanismo a la carta entonces tendremos que decir que se ha hecho en el RAC, en Gardoki, en los terrenos de Iparlat...".
De hecho, la de ayer tampoco es la primera vez que los socialistas cuestionan el modelo de urbanismo que se está proyectando en Bilbao. En otras ocasiones, Oleaga ha criticado también que se hace un "urbanismo a la carta" para favorecer intereses privados. A este respecto, Azkuna le rebatió que "privados somos todos los ciudadanos y todos los proyectos salvo los funcionarios".
También la portavoz del PP, Cristina Ruiz, destacó que se haya "dado un paso más para que el IMQ sea una realidad", aunque pidió más información en un futuro.