“Espero que hayan aprendido, que mi experiencia les haya podido enseñar algo con mi forma de trabajar y de afrontar el día a día en los malos y los buenos momentos, cuando las cosas salen bien y cuando no salen tan bien. Que tengan un buen recuerdo de mí. Las palabras de los compañeros hacia mí han sido muy bonitas y creo que dejo el legado de ser un buen compañero, un buen capitán y un ejemplo. Desde el ejemplo puedes exigir a los demás y es lo que he intentado desde que llegué. Espero que ahora coja alguien el relevo y pueda enseñar a los próximos jugadores qué es el Bilbao Basket y cómo se debe defender esta camiseta”.
Con estas palabras de emoción y agradecimiento, Xavi Rabaseda se ha despedido este martes del Surne Bilbao Basket, conjunto en el que ha militado las tres ultimas campañas ejerciendo en todas ellas de capitán a las órdenes de Jaume Ponsarnau. El alero catalán, de 36 años, ha mostrado su agradecimiento “a la gente del club, staff, oficinas... Me llevo muchos amigos. Será difícil los primeros meses y espero que la temporada que viene nos volvamos a ver”.
Tras el vídeo que abrió su acto de despedida, Rabaseda reconoció que “viendo estas imágenes soy un afortunado. Han sido tres años espectaculares en Bilbao, con el equipo y la ciudad, donde han crecido mis hijos. El otro día me preguntaba mi hijo si podía seguir siendo del Athletic ahora que nos vamos. Bilbao seguirá en nuestros corazones, hemos hecho una cuadrilla y seguro que volveremos de alguna manera”.
Quería seguir
A la hora de destacar un momento especial, apuntó que “las imágenes del título continental son muy bonitas, pero para mí el último día fue muy emotivo. Eso ocurre cuando haces las cosas bien y eso es lo que me llevo. Lo tengo de Gran Canaria, de Barcelona, de aquí... Alguien me dijo que lo que hacemos profesionalmente al final se olvida, pero que lo que hacemos sentir permanece. Espero que la gente se acuerde con cariño de mi paso por Bilbao. ¿Y qué le ha faltado? “Me ha faltado poder seguir. Pero estas cosas pasan, es deporte profesional. Yo ya he estado en seis equipos y ahora tendré que buscar otro”, señaló, avanzando que “de momento no tengo una idea. Me gustaría seguir jugando, estoy bien físicamente y buscaré mis opciones de mercado. Aún es pronto y no sé nada”.
En este sentido, Rabaseda no escondió que el recorte de protagonismo en cancha que ha sufrido este curso no ha sido nada sencillo de llevar. “No es fácil ir al día a día a intentar dar el máximo y que esas cosas cambien y que no haya el resultado que esperas. Pero en deporte profesional pasa. Recuerdo una charla que dimos con Raúl García, que decía que o te rindes y le das la razón al entrenador o luchas por cambiar la situación. Es lo que voy a intentar hacer”, destacó, recalcando que “he intentado ser la mejor versión de mí en cada sitio en el que he estado y siempre poniendo al equipo delante de mí”.
La importancia del título
Pese a que ha llegado el final de su experiencia en Bilbao, aseguró que “todo ha superado lo que podía pensar. No pensaba ganar un título europeo, no sabía que iba a ser aita por segunda vez… Nos llevamos muy buenos momentos de Bilbao. En Twitter me ponían en el mismo grupo de Roger Grimau, Raúl López y Álex Mumbrú y eso me hace estar muy orgulloso. No soy el primer catalán que pasa por aquí y se enamora de Bilbao”. En ese sentido hizo hincapié en el hecho de haber ganado “títulos con equipos que no es normal hacerlo como con Gran Canaria, Burgos o Bilbao Basket. Tiene mucho más peso porque es muy difícil ganar y hay que disfrutarlo cuando se consigue”.
De su paso por Bilbao no se ha quedado con un compañero en especial sino con los grupos: “No puedo quedarme solo con uno. El sábado estuve con Tomeu Rigo, con Álex Reyes he hablado todo el año… Mientras Bassala (Bagayoko) no me moleste mucho me puede seguir preguntando cosas (risas). Me llevo muy buenas relaciones personales fuera de la pista”.
Su heredero
Eso sí, si tiene que elegir alguien para coger la capitanía del Bilbao Basket lo tiene claro: “Sería seguramente Tomasz Gielo (presente en la despedida junto a varios miembros del cuerpo técnico) quien pueda dar ese paso adelante. Aunque tengamos, bueno tengáis, a Harald, a Melwin o Tryggvi, que tiene experiencia, igual le falta ese carácter. Los días que yo estuve fuera seguramente fue Tomasz el que dio el paso adelante. Tiene el punto de liderazgo, experiencia y puede ser un muy buen capitán. Lo dejo en buenas manos”.