Tras el parón como consecuencia de la disputa de la Copa y de las ventanas FIBA, la Liga Endesa se prepara para su tramo final de competición. Con veinte jornadas ya disputadas, y a falta de catorce, cada equipo tiene ya claros los objetivos que deberá afrontar hasta que la temporada regular baje su persiana y en el caso del Surne Bilbao Basket la meta pasa por esa frase que ha acuñado Jaume Ponsarnau durante estos últimos ejercicios como aspiración principal: acabar como uno de los 16 mejores equipos de la competición. Con siete escuadras luchando por eludir las dos últimas plazas y un nivel de igualdad superior al de anteriores ejercicios –el conjunto vizcaino, igualado con el Morabanc Andorra con balance de 7-13, tiene una victoria de colchón sobre el penúltimo clasificado, el Básquet Girona, que a su vez calca la hoja de servicios de Hiopos Lleida y Coviran Granada–, los hombres de negro afrontan este mismo domingo uno de esos duelos que reúnen los dos componentes que elevan al máximo su nivel de trascendencia: se disputa en el Bilbao Arena y presenta como adversario a un enemigo directo: el mencionado Girona.

Hasta el momento, la eficacia de los de Ponsarnau en las citas que conjuntan estos dos rasgos identitarios ha sido magnífica, cosechando victorias autoritarias ante los tres rivales que hasta el momento han visitado Miribilla. El Río Breogán, la escuadra más aventajada en la lucha por escapar de la quema –12º, con balance 8-12– pasó por Bilbao en el encuentro inaugural de la temporada en la Liga Endesa y se llevó un abrumador 90-72 en un encuentro que se mantuvo equilibrado durante los tres primeros cuartos pero en el que los locales pasaron por encima de los gallegos en los últimos diez minutos, resueltos con un parcial de 26-11. Tampoco el Andorra fue capaz de conquistar Miribilla en el duelo inaugural del nuevo año 2025. Los anfitriones llegaron a dominar por veinte puntos tras el ecuador de la cita (51-31) y a pesar de los intentos de acercamiento por parte de los del Principado acabaron ganando por 82-74. Y recientemente fue el Lleida el que salió derrotado con autoridad de su paso por el pabellón bilbaino en un partido bien controlado por los de Ponsarnau pese a los amagos de revuelta de los visitantes. De hecho, llegaron a tener en su mano la opción de recuperar el average (-18) con respecto al enfrentamiento de la primera vuelta, aunque el resultado final se quedó en 91-75.

Mantener la solvencia acreditada en este tipo de partidos se antoja vital para los intereses bilbainos, teniendo en cuenta que, además de los de Moncho Fernández, todavía tienen que pasar por Bilbao el Granada (24ª jornada) y el Leyma Coruña (31ª), colista con solo cuatro victorias hasta el momento. Por el momento, la hoja de servicios de los hombres de negro en feudo propio arroja un saldo positivo aunque de manera ajustada, con un total de cinco victorias y cuatro derrotas. En Miribilla hincaron también la rodilla dos de los conjuntos que disputaron la reciente edición de la Copa, el Real Madrid (83-79) y el Baxi Manresa (88-73), mientras que se llevaron el triunfo cuatro escuadras ubicadas también en la zona noble de la clasificación: Valencia Basket (98-103), Joventut (79-95), Baskonia (67-69) y Unicaja (81-86).

Encuentros en casa

Por el momento no se han registrado accidentes graves del Surne Bilbao Basket en lo que a sus partidos como local se refiere y de mantener esa dinámica dependerá en gran medida el grado de tranquilidad o inquietud con el que se viva este tramo decisivo de temporada. Sacar adelante las citas contra los mencionados tres rivales directos se antoja vital, además de amarrar más victorias ante el resto de contrincantes que aún deben rendir visita al recinto vizcaino: La Laguna Tenerife, Dreamland Gran Canaria, UCAM Murcia, Casademont Zaragoza y Barça. La reactivación del conjunto vizcaino después del parón de la competición en noviembre no fue satisfactoria, circunstancia que toca corregir para evitar problemas.