El Bilbao Basket agradece poder entrenarse en Artxanda después de casi dos semanas sin pisar Bilbao. Toca preparar en su refugio el complicado duelo de mañana ante el Valencia, “un equipazo que nos va a obligar a dar nuestro mejor nivel para ganar”, dice Jaume Ponsarnau. El entrenador de los hombres de negro da por bueno este periplo de partidos y viajes incómodos ya que, al margen de los resultados obtenidos, ha podido “aprender que el grupo tiene energía y fuerza. La sensación es que el equipo puede asumir esta exigencia de viajes y partidos”. Pese a ello, reconoce que está pensando en la idea de hacer “rotaciones más cortas” e, incluso, ampliarla para poder afrontar a rivales que imponen un alto ritmo y porque hay jugadores que vienen destacando en Europa.

Es el caso de Rubén Domínguez, “un jugador que ya en pretemporada estaba llamando a la puerta. Pero hay que pensar en otros jugadores que por veteranía también tienen que encontrar su espacio y su forma y que necesitamos para competir al nivel que queremos”. No obstante, Ponsarnau advierte de que llegará el momento del gaditano y pide paciencia: “Sabemos que tenemos un buen proyecto entre manos y pensamos que a corto plazo también nos puede ayudar. Pido que la gente confíe en mi experiencia y en que sabremos llevarlo de la mejor manera posible”.

El partido de mañana situará al técnico de Tàrrega como el tercer entrenador con más partidos dirigidos al Bilbao Basket entre ACB y Europa y lo hará ante un club “al que le debo muchísimas cosas”. En la temporada 2016-17 fue ayudante de Pedro Martínez, que ahora vuelve a ocupar el banquillo taronja. “Pude reconducir mi carrera como entrenador, tener nuevas motivaciones y redescubrir el placer de entrenar”, afirma Ponsarnau, que concede un “doble mérito” a lo que está haciendo el Valencia Basket en estos primeros compases del curso en los que el equipo se ha adaptado muy rápidamente a la propuesta de su entrenador, algo que no era fácil por las características de varios jugadores y los muchos cambios en la plantilla respecto al año anterior. “Por un lado, doy mérito a Pedro por ser fiel a su propuesta y, por otro, a los jugadores por ser entreñables, un valor muy cotizado hoy en día. Han tenido esa virtud y lo están aprovechando”, concluye el técnico del Bilbao Basket.