El Surne Bilbao Basket afronta mañana un partido importante porque a nadie se le escapa que conviene cortar la racha de derrotas que ya se extiende a cuatro. Para ello, Jaume Ponsarnau sigue pidiendo a su equipo una mejora “y un paso más en la solidez para jugar y defender bien, de la que no estamos satisfechos”. El equipo bilbaino ha tenido “casi siempre un buen nivel competitivo, pero no nos conformamos con esto. Tenemos que encontrar a más jugadores que saquen su mejor juego en ataque y en defensa y eso pasa por seguir trabajando para que no se resienta el juego colectivo”.

Los hombres de negro están metidos en un tramo complicado del calendario ante rivales que han sido “un poquito mejores” y el técnico está ocupado en buscar ese plus que falta para volver a ganar. “Más que ganar o perder lo que nos preocupaba era encadenar partidos sin acierto. Y ahora no. De meterla no nos hemos olvidado. Contra el Real Madrid metimos y a eso nos tenemos que agarrar. Buscar esas confianzas y si no, agarrarnos a la táctica colectiva y jugar a algo identificable en esos momentos en que parece que los partidos se nos escapan. Ahí tenemos que ser más rigurosos y no depender de la inspiración individual porque hay bastantes jugadores que no están encontrando su mejor juego, pero mi labor es darles las herramientas adecuadas para que lo saquen”, comenta Ponsarnau, quien apunta que la buena trayectoria europea dice que “de ganar no nos olvidamos”.

Una victoria mañana ante el Joventut , “que también está necesitado y que aún puede aspirar a estar más arriba”, ayudaría a recomponer la figura y mirar al futuro inmediato sin preocupación. El equipo verdinegro ha sufrido una plaga de lesiones, sobre todo de hombres claves como Andrés Feliz y Ante Tomic, ha cambiado algunas piezas y ahora mismo depende mucho del rendimiento de sus jóvenes, con sus altos y sus bajos, lo que no significa que el partido vaya a ser sencillo ya que “ellos siguen teniendo capacidad de jugar muy bien al baloncesto y nosotros tenemos que tener tantas ganas de ganar como ellos”.

“Es un partido difícil de preparar porque tenemos poca información válida del Joventut. La sensación es que tenemos que prepararnos para muchas cosas y en estos casos lo mejor es prepararte a ti mismo y estar centrados en encontrar nuestro juego”, apunta el entrenador del Bilbao Basket, que espera que sus jugadores sean capaces de “encontrar buenos tiros y no dejar que el Joventut lleve el ritmo. Además, cuando nos empiece a fallar la energía tenemos que ser inteligentes”.

En cuanto a las lesiones que apartaron a Alex Renfroe y Sacha Killeya-Jones del último partido de la FIBA Europe Cup, Ponsarnau espera recuperar a ambos, aunque el pívot sigue con molestias tras el golpazo que se pegó en el partido contra el Real Madrid.