El Surne Bilbao Basket tiene hoy una oportunidad de recuperar algunas de las señas de identidad que extravió en sus viajes a Granada y Lugo. El derbi ante el Baskonia siempre eleva la motivación, pero lo hace en los dos lados, y eso obligará a los hombres de negro a dar su mejor versión para lograr la victoria o, al menos, estar cerca de ella. La abultada derrota de los gasteiztarras el viernes en la Euroliga complica aún más las cosas porque los de Joan Peñarroya saldrán con ánimo de que alguien pague los platos rotos en Lyon. A la vez, el Bilbao Basket puede aprovechar las dudas que ese resultado inesperado haya podido provocar en el bando baskonista que está también en proceso de ajustar algunas piezas. En este tipo de duelos, la iniciativa siempre es del equipo superior, que suele dictar el curso de los acontecimientos. Cabe recordar el derbi de la pasada temporada al que el Baskonia llegó con gran carga física y se lo llevó con mucha autoridad.

Se da la circunstancia de que se cruzan hoy el equipo con mejores porcentajes de tiro con otro, el Bilbao Basket, que ha flojeado en ese aspecto en las últimas citas. El Baskonia anota seis triples más por partido y lanza con una efectividad casi diez veces superior. Jaume Ponsarnau cree que los suyos tienen todas las de perder en cifras altas, pero también lo tienen complicado si no alcanzan los 75-80 puntos a favor. La manta deberá tapar todo a partir de una concentración y una precisión máximas y el Bilbao Basket, estar mejor que bien en los dos lados del campo para sumar un triunfo que consolidaría el buen inicio de temporada. La defensa de los hombres de negro tiene el reto de frenar las transiciones baskonistas y su buena ocupación de las esquinas mientras que en ataque deberán encontrar en mejores condiciones a Smith y Alonso, dos jugadores claves para competir de tú a tú hoy.

Para varios jugadores será el primer derbi, al margen de la Euskal Kopa, y habrá que ver quién asimila mejor la presión ambiental. Si Radicevic está disponible, aunque sea para jugar unos minutos, será una gran ayuda para liberar de responsabilidades a la gente del perímetro, lo mismo que Suljemanovic supone un elemento clave ante la movilidad de los interiores del Baskonia. Los gasteiztarras suman a Henry para añadir intensidad y ritmo a un juego exterior con muchas amenazas. El factor Miribilla, donde aún no ha perdido el Bilbao Basket, puede igualar el pronóstico y suponer un impulso para volver a la senda de las victorias.