Con la Liga Femenina en semifinales y buscando campeón y con la Liga Challenge a punto de conocer el equipo que acompañará al Leganés en el ascenso, ya han empezado los movimientos en los banquillos y en las plantillas para la próxima temporada. Lucas Fernández y el Gernika aún no han cerrado nada, aunque pronto puede haber una decisión. “Estamos en estas semanas en una puesta en común con el club sobre lo que pensamos cada uno, con la confianza y tranquilidad de una relación ya consolidada en un sitio que considero como mi casa. Buscaremos la mejor opción para las dos partes, hay buena sintonía y a ver si podemos definir en las próximas fechas el camino que tomamos. Creo que no tardaremos en hacerlo”, comenta el técnico manchego.

Una vez se aclare el futuro, el club tendrá que abordar la planificación de la plantilla, de nuevo sin la posibilidad de jugar en Europa. Fernández sabe que “para algunas jugadoras eso es algo innegociable a la hora de firmar con un equipo”, aunque es una realidad “que viven ocho equipos de la Liga Femenina y otros ocho, no”. Sin embargo, hay otras jugadoras que ”atienden a lo que les puede ofrecer el destino en cuanto a otras cuestiones que tienen que ver con lo que les transmiten otras compañeras”.

A la hora de acudir al mercado, el Lointek Gernika tiene que determinar los recursos con los que cuenta “y dónde nos pone eso en las preferencias de las jugadoras, aunque podemos ser competitivos”. El perfil de las jugadoras también dependerá de encajar todas las piezas. “El club tiene unos mínimos a la hora de incorporar jugadoras, pero sabemos que la liga ha crecido en capacidad física y amenaza desde la línea de tres, unos parámetros que todos buscamos”, concluye Lucas Fernández.