bilbao - Tobias Borg busca su sitio en este nuevo Bilbao Basket en el que siente que tiene más responsabilidad y que puede conseguir lo que buscaba cuando llegó al equipo hace ya tres veranos. “Estoy jugando más y es lo que buscaba porque quiero dar un paso adelante y continuar con el trabajo que hice las dos temporadas anteriores”, comentó ayer el jugador sueco, que con Carles Duran ejerce de base, con una titularidad ya este curso, y considera que puede “aprender mucho de Tabu y de Salgado y entre los tres nos podemos ayudar”. Además, “saber que voy a jugar cada partido me hace sentir con más confianza”, aseguró el jugador de Sodertalje, que también espera aumentar su aportación ofensiva con el paso de los partidos.
Esa confianza se extiende a todo el grupo después del impecable comienzo de temporada con tres victorias seguidas. “Estamos muy contentos porque los resultados reflejan que jugamos como un equipo. Estamos jugando duro y haciendo las cosas bien en defensa, lo que nos permite jugar mejor en ataque”, apuntó Borg en la semana previa a medirse al Barcelona, “un equipo muy bueno y muy duro, pero seguro que vamos a competir y tener opciones de ganar”.
audiencia nacional Por otro lado, la Audiencia Nacional dictó ayer sentencia por la que declara nula la resolución del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) de 26 de septiembre de 2014 que permitió la inscripción del Bilbao Basket en la ACB en la temporada 2014-15. En concreto, afirma que la resolución del TAD “no tenía justificación jurídica alguna” y reconoce expresamente “la capacidad de las ligas como asociaciones privadas para organizar sus propias competiciones”. Además, advierte de que el TAD “no es competente para revisar un acto privado de las ligas” y de que la potestad disciplinaria sobre los clubes “solo puede ser ejercitada cuando el club está integrado en la liga”, pero si el club no ha superado el proceso de admisión, como era el caso entonces del Bilbao Basket, no se le podía aplicar el derecho disciplinario.
La Audiencia puntualiza también que no es cierto que la ACB hubiera privado al club de las garantías que están previstas en los procesos disciplinarios, “sino todo lo contrario según se desprende de las múltiples comunicaciones entre la ACB y el club”.
La ACB excluyó al Bilbao Basket, según justificó en su día, “por no restituir las cantidades del Fondo de Garantía Salarial y tener deudas pendientes con la ACB y la plantilla deportiva que superaban la cuantía permitida por la liga”, pero el club inició un recorrido judicial que llevó a su admisión de forma cautelar, el primer paso para lo que ocurrió ayer. La ACB tenía razón, pero una vez dentro, la sentencia hecha pública ayer, más de dos años después de los hechos juzgados, “no afecta a la participación del Basket Bilbao Berri SAD, que podrá continuar jugando en competiciones ACB”. Justo lo que se sabía que iba a pasar.