Bilbao - Rivales con mucha historia y galones continentales. Equipos de notable potencial deportivo y económico -superlativo en alguno de los casos-. Denominaciones de origen muy interesantes y reconocibles para el aficionado desde el mismo momento en el que se lance al aire el primer balón. La Eurocup 2016-17 promete emociones fuertes desde el arranque para el Bilbao Basket. El descenso en el número de equipos que jugarán el próximo curso tanto la Euroliga (16) como la segunda competición continental (24) traerá consigo un ecosistema mucho más competitivo y nivelado en las trincheras en las que tendrán que batirse el cobre los hombres de negro. Para empezar, en el grupo en el que quedaron encasillados ayer en el sorteo celebrado en Barcelona no hay cenicientas como en anteriores ejercicios. Ni siquiera medianías ni conjuntos anónimos. El cuadro vizcaino medirá sus fuerzas de buenas a primeras ante Khimki, Alba Berlín, Lietuvos Rytas, Foxtown Cantú y Partizán de Belgrado. Y todo esto de primer plato, sin tener que esperar a superar rondas.
Puede que por primera vez desde que toma parte en la Eurocup, donde presenta un excelente balance de 55 victorias y 24 derrotas y ha sido una vez finalista (Charleroi’13) y semifinalista en dos ocasiones (Turín’09 y Gasteiz’10), el Bilbao Basket no parte como favorito de grupo en la primera fase de la segunda competición continental. Y no solo por la incertidumbre que rodea a la confección de su plantilla y cuerpo técnico, al potencial que podrá alcanzar en esta etapa de vacas flacas en lo económico, sino por la identidad de sus contrincantes. Todos ellos pueden presumir de tener en sus vitrinas algún título continental. De hecho, los dos campeones de Europa presentes en la competición habitan en este Grupo B: Cantú y Partizán.
Los rusos del Khimki, uno de esos clubes que tienen el dinero por castigo, han ganado la Eurocup en dos ocasiones (2012 y 2015), además de haber conseguido disputar cuatro de las últimas siete ediciones de la Euroliga. El Alba Berlín presume de la Copa Korac que le arrebató al Stefanel Milán en 1995, con Svetislav Pesic en su banquillo. El Lietuvos Rytas lituano, por su parte, posee también dos títulos de la Eurocup (2005 y 2009), además de un subcampeonato (2007). El Partizán tocó el cielo en 1992 en Estambul cuando conquistó el cetro continental ante el Joventut de la mano de los jovencísimos Aleksandar Djordjevic y Pedrag Danilovic (además, conquistó la Korac en 1978, 79 y 89), pero la palma en cuanto a palmarés se la lleva el Cantú de los míticos Marzorati, Riva o Recalcati. Pese a que sus tiempos de gloria quedan ya en el pasado, el club italiano presenta dos Copas de Europa (1982 y 83), cuatro Korac (1973, 74, 75 y 91) y otras tantas Saportas (1977, 78, 79 y 81).
Viejos conocidos Sin llegar ni de lejos al poso continental de sus rivales, el Bilbao Basket va también haciendo su camino en Europa -esta será su sexta Eurocup, a la que hay que sumarle su recordado curso en la Euroliga-, por lo que no es de extrañar que tenga en su currículum enfrentamientos con todos sus rivales del grupo salvo el Partizán. Los duelos ante el Lietuvos (victoria en casa 67-59 y derrota fuera 73-71) llegaron en el Last 16 del curso 2008-09, en el que los lituanos ganaron el título. Precisamente, fue el Khimki el que apartó de la final a los hombres de negro en aquella edición al batirles por 79-73. El Alba Berlín también tiene presencia entre las bestias negras del conjunto vizcaino, pues fue el que le dejó sin final en Gasteiz’10 (77-70). Ante el Cantú, el doble enfrentamiento llegó en la primera fase de la Euroliga 2011-12, con dos triunfos italianos (78-69 y 64-67, con aquel triple de Basile sobre la bocina.
Aunque puede que los bombos no hayan decretado los viajes más cómodos ni económicos para el club, los aficionados podrán ver a su equipo competir y buscar el Top 16 ante muy buenos rivales. Todos campeones.