bilbao. Roger Grimau entrará hoy en un territorio que le es muy familiar. El Gescrap Bizkaia debuta en el Top 16, una fase que el alero catalán ha visitado en los últimos nueve años. Además, el equipo bilbaino se estrena en la cancha del Montepaschi Siena, un viejo conocido para Grimau, que se ha medido a los toscanos en diez partidos. De hecho, esta será la cuarta temporada consecutiva en que se cruza con el conjunto de Simone Pianigiani en la Euroliga. "Sé por experiencia que son un equipo muy duro", advierte el más experto en estas lides de los jugadores del Gescrap Bizkaia.
Llega el debut en el Top 16 para el Gescrap Bizkaia. ¿Cómo lo afronta el equipo?
Bien, porque entramos ya en una fase decisiva de la temporada. En el Top 16 no hay casi margen para el error. Particularmente, me habría gustado empezar en casa, pero ha tocado así y vamos a ver como resulta. Creo que tenemos nuestras opciones.
En una competición como la Euroliga, ¿se eleva mucho la exigencia en el Top 16 respecto a la primera fase?
Evidentemente, estamos ahí los dieciséis mejores equipos de Europa y eso ya es bastante para darte cuenta del nivel que tiene. Además, no hay tiempo para corregir los fallos. Es una competición tan corta que ocurre que las victorias te pueden dar mucho, pero también las derrotas inesperadas te penalizan mucho. No te puedes descuidar porque lo pagas caro.
El venir de un grupo tan igualado en la fase anterior, que obligó a pelear hasta la última jornada, ¿puede ayudar al Gescrap Bizkaia a afrontar estos partidos?
No lo creo. El Top 16 es siempre muy duro, además hemos entrado como cuartos por lo que, en teoría, tenemos tres equipos mejores que nosotros. Es cuestión de luchar mucho cada partido, de hacernos muy fuertes en casa e intentar ganar algún partido fuera.
A muchos no les gusta verse en Europa con rivales de la Liga Endesa y en este grupo hay tres. ¿Cuánto influye eso?
Lo positivo son claramente los desplazamientos. Nos metemos en una fase de la competición muy dura en la que habrá muchos partidos y si reduces las horas de viaje, será muy bueno. También puede ser bueno que nos conozcamos los equipos porque eso te da más opciones de saber cómo jugar y cómo ganar. Y, particularmente, no le veo nada negativo, no me parece tan determinante porque todos los equipos son buenos.
¿Piensa que el Gescrap Bizkaia llega al Top 16 en un estado anímico ideal o cercano al ideal tras los dos últimos triunfos?
Ganar te hace sentir mejor, está claro. Estos dos partidos en Zaragoza y Valladolid eran muy importantes para nosotros. Esperemos que sirva para poder hacer otro gran partido en Siena y poder ganar.
¿Se han quitado mucho peso de encima? ¿Había preocupación en el vestuario?
Lógico, estábamos preocupados porque los resultados no salían. De hecho, aún no estamos donde queremos estar, pero tenemos que ir con tranquilidad, ocuparnos solo de hacer mejor las cosas para tratar de alargar esta racha lo máximo posible.
El equipo ha tenido durante la temporada varios momentos en que podía repuntar. ¿Qué es lo que ha faltado para no enganchar esa racha de victorias?
No sabría decirte qué exactamente, pero el caso es que no hemos estado bien. Nos ha faltado cerrar los partidos, controlarlos mejor. Se nos han escapado tres partidos que teníamos en las manos, por no hablar de otros. Si hubiéramos ganado esos tres partidos, estaríamos en una situación diferente. A veces, un balón, dos balones, deciden y te hacen cambiar la manera de ver las cosas. Pero, ya digo, lo importante es coger esta buena linea y no salir de ella, ganando o perdiendo. Porque puedes jugar bien y perder, se ha demostrado. Lo que queremos es ser más regulares en ese sentido.
Ha sorprendido que con el oficio y la experiencia que tiene el equipo se hayan escapado esos partidos que dice.
Claro, pero es que esto tampoco es matemático. Da igual si tienes jugadores veteranos o expertos. Si te tienen que meter un triple, lo harán, lleves once temporadas en la Liga o una. Esas cosas no tienen nada que ver con la experiencia. A veces tiras y fallas, pero ahí no tiene que ver la edad.
En su caso, ¿el Grimau que estamos viendo se acerca al que usted mismo esperaba?
No tengo ninguna idea predeterminado en cuanto a mi rol en el equipo. Está claro que todos los jugadores quieren ser importantes y para ello hay varias maneras. Una es tener muchos minutos en pista y mucho protagonismo para destacar y otra es aportar cuando se necesita y trabajar en lo que te toque para ayudar a ganar y yo con esta situación me doy por satisfecho.
¿Y qué podemos esperar del Montepaschi Siena? Es un equipo al que usted conoce muy bien.
Sí, es un equipo muy duro que en defensa aprieta muchísimo y que tiene calidad en ataque, gente muy resolutiva. En su cancha se hacen muy fuertes. Su defensa es muy buena y lo aprovechan para robar balones, correr y tratar de imponer un ritmo muy alto.
Habrá que advertir al seguidor bilbaino de que los italianos son más que Bo McCalebb.
Yo he jugado muchas veces contra ellos, pero aunque hayan cambiado jugadores en los últimos años el entrenador es el mismo y por eso la filosofía de juego, también. Tienen mucho dinamismo y mucha agresividad, usan mucho las manos y quieren ser muy verticales. McCalebb les permite marcar las diferencias, pero sin él también son muy buenos.
El Gescrap Bizkaia tendrá que jugar al nivel de Gasteiz o de Estambul.
Sí, no queda otra. Para ganar allí habrá que dar lo máximo que podamos, como en todo el Top 16. Pero no solo nosotros, todos los equipos lo tienen que hacer si quieren seguir avanzando.