Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, ha convocado de urgencia este jueves a los representantes del Athletic y la Real Sociedad. Sobre la mesa, estudiar la posibilidad de que la final de Copa del próximo 3 de abril en La Cartuja cuente con público. En la reunión, que se celebrará en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas a partir de las 16.00 horas, la FEF planteará que la gran cita del fútbol vasco se convierta en el primer partido del fútbol estatal tras la pandemia que albergue espectadores en las gradas. A este encuentro también asistirá una delegación de la Junta de Andalucía encabezada por el secretario general para el Deporte, José María Arrabal, así como una representación del Consejo Superior de Deportes.

Los planes de la Federación, según ha adelantado la cadena Ser, es que el estadio andaluz pueda acoger hasta 15.000 personas en sus localidades (un 25% de su aforo total). La cuestión es que el cierre perimetral instaurado en la Comunidad Autónoma Vasca hasta después de Semana Santa impedirá el desplazamiento de simpatizantes de los dos equipos. Pero ya no sería una final desangelada sin la presencia del calor de la grada, ya que los residentes en Andalucía que deseen acudir a ver el histórico derbi en directo sí lo podrían hacer, siempre que se hagan con una de las entradas. En Andalucía son numerosas las peñas rojiblancas.

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El Athletic y la Real no se han pronunciado al respecto (lo harán cuando conozcan de primera mano el planteamiento de Rubiales), pero ambos equipos decidieron aplazar la final, prevista para la temporada pasada, ante la posibilidad de que se disputara con público. Con el visto bueno de la FEF, a bilbainos y donostiarras este paso les costó quedarse sin la plaza europea que había en juego si la final se hubiese celebrado a puerta cerrada cuando tocaba por el calendario.

Los que no estarán en La Cartuja son los representantes de las instituciones vascas. Así lo han asegurado desde el Gobierno vasco y desde los Ayuntamientos de Bilbao y Donostia. Ante la imposibilidad de que los residentes en Euskadi pongan rumbo a la capital andaluza para asistir en directo al duelo, Iñigo Urkullu, Juan Mari Aburto y Eneko Goia ya han advertido de que verán el encuentro en sus respectivos hogares.

Está por ver qué ocurre con la final del 17 de abril ante el Barcelona, ya que después de Semana Santa se revisarán los cierres perimetrales instaurados en el Estado español.