Ahora que presumir de ser de ultraderecha parece que está de moda tanto en el Estado como en buena parte de Europa, especialmente entre los jóvenes, el Athletic tiene el potente altavoz mediático de Iñaki Williams para luchar contra esa lacra. El bilbaino es el primer capitán negro en la historia del conjunto rojiblanco y desde su posición de privilegio intentará “callar bocas”.
“Supone mucho”, ha asegurado Iñaki en la sala de prensa de Lezama cuando se le ha cuestionado por lo que significa lograr un hito así. “El destino es el destino. Si no fuese por mis padres ni Nico ni yo estaríamos aquí. Tenemos la suerte de representar a mucha gente que viene desde fuera para ganarse el pan cada día y ser una referencia a nivel de Euskadi es importante. Tanto Nico como yo, los que viene, Adama (Boiro), Álvaro (Djaló) que ya no está, Adu… somos gente de familia muy humilde y poder exponer de esta manera lo que viene a hacer aquí la gente es bueno para todos. Parece que está de moda la ultra derecha y los que tenemos voz intentaremos seguir trabajando, callando bocas y tirando barreras”.
Primer capitán
En un verano muy especial para él a nivel personal, en el que su pareja y él han hecho público que van a ser padres, Iñaki ha admitido que la capitanía del Athletic le llega “en un momento de madurez muy bueno”. “Este año me toca ser el primer capitán. He tenido la suerte de tener grandísimos capitanes como Iker (Muniain), Óscar (De Marcos) o Gurpegi. He crecido viendo a los mejores. Llevo once años en el primer equipo e intentaré, dentro de lo que soy yo, poner mi granito de arena”, ha agregado.
No ha ocultado que por su cabeza ha pasado que la responsabilidad de ser capitán le iba a “pesar”, pero ha asegurado estar “preparado”. “He tenido grandísimos profesores. Quién me lo iba a decir cuando llegué en juveniles. Hoy soy el primer capitán. Es una alegría inmensa poder venir de la cantera y asentarme en el primer equipo durante tantos años, que nunca es fácil. A base de trabajo, esfuerzo y humildad he podido conseguir mis sueños. Y ahora lo afronto con mucha madurez y muchísimas ganas”.