A dos meses de que Bilbao acoja la final de la Europa League, los aledaños de San Mamés se siguen preparando para cumplir con todas las exigencias que la UEFA ha fijado en materia de seguridad. Lo más llamativo para los viandantes que pasan a diario por la explanada del estadio ha sido la instalación de las vallas que delimitan el perímetro para el acceso de las aficiones. Un entramado de mecanotubo que se probó en parte ante la Roma, que rodeará el exterior del campo y que en los últimos días está siendo ampliado. El jueves 17 de abril, coincidiendo con la visita del Rangers en el partido de vuelta de los cuartos de final, el dispositivo vivirá una nueva prueba.
Al margen del vallado, hay más obras que el Ayuntamiento de Bilbao está acometiendo a instancias del máximo organismo del fútbol europeo. Una tiene que ver con el acceso de los autobuses de los equipos a ‘La Catedral’. Los responsables de la UEFA quieren que los vehículos, con especial atención a los autobuses de los equipos participantes, cuenten con dos posibles accesos al estadio, por lo que se está procediendo a habilitar una especie de pequeña explanada en la trasera de San Mamés para que los autobuses puedan maniobrar y dar la vuelta sin entran por la calle Alameda Urquijo y atravesarr la explanada.
Lo habitual es que los autobuses accedan al campo por la calle Felipe Serrate según suben por Sabino Arana y que luego bajen por el Camino de la Ventosa, donde está ubicada la entrada del parking de San Mamés. Sin embargo, la UEFA ha pedido un plan B. En alguna ocasión, los autocares de los equipos han cruzado la explanada y han bordeado el campo para tomar el Camino de la Ventosa, cruzando toda la parte de atrás de San Mamés. De hecho, esa fue la principal novedad con el bus del Atlético de Madrid en la previa del partido de vuelta de la semifinal de Copa que se celebró en Bilbao en febrero del pasado año.
Por detrás del edificio de Ingeniería
Entonces, tal y como se ha repetido en los partidos europeos de la presente campaña, el vehículo, custodiado por la Ertzaintza, recorrió el camino que queda entre el edificio II de la Escuela de Ingeniería de Bilbao y el acceso de la A-8 a Bilbao para girar a la derecha y llegar por la parte de atrás del campo hasta el Camino de la Ventosa. Todo ello, sin gente alrededor, si bien el giro entre el campo y la carretera de acceso al parking exigía a los conductores realizar más de una maniobra ante la imposibilidad de hacer el giro a la primera.
Ahora, para hacerlo más cómodo, los vehículos podrán bajar por una estrecha cuesta y dar el giro justo antes de la puerta del aparcamiento. Es por ello que a base de hormigón han rellenado la acera para habilitar unos metros para que los conductores puedan maniobrar sin problemas. Está por ver si esta pequeña pista se prueba en la vuelta de los cuartos de final del próximo 17 de abril, que enfrentará al Athletic con el Glasgow Rangers con un billete en juego para las semifinales de la Europa League.