Mikel Vesga (Gasteiz, 8 de abril de 1993) se convirtió en uno de los grandes protagonistas de la victoria que firmó el Athletic el pasado sábado sobre el Atlético de Madrid y que mete al colectivo de Marcelino en la pomada por la conquista de una de las dos plazas europeas que restan por repartir. El gasteiztarra asomó una versión imperial ante el conjunto colchonero y ha reconocido que "no sé si fue mi mejor versión como jugador del Athletic, pero sí estuve mucho mejor que en otros partidos", para insistir en su deseo de que "se repita más veces esta versión, que permita mejorar esos registros que van de poco a poco a más".

Vesga ha subrayado que su soberbia actuación ante el Atlético no tiene porqué hacerle cambiar y se mantiene en su humilde discurso. "Siento que soy el mismo. El partido fue completo por parte de todos, de ahí el resultado. Estuve mejor que en otras ocasiones, pero es que el equipo sacó su mejor versión", ha apuntado el centrocampista, que acumula 130 partidos oficiales como león y en los que ha anotado tres goles, dos de ellos en este curso, lo que delata el paso adelante que ha dado a la hora de tener más llegada al área contraria: "El míster nos pide que estemos cerca del área, eso hace que podamos llegar a esas situaciones de gol, y también es cierto que el equipo necesita que (los centrocampistas) aportemos y que hagamos ocasiones, que es bueno para el equipo".

El sábado le tocó disfrutar de los aplausos y de acaparar titulares en los medios de comunicación. Sin embargo, el gasteiztarra se ha erigido en un buen número de ocasiones en el muñeco del pim pam pum cuando las cosas no le salían, ni tampoco al equipo. Vesga dice asumir las críticas. "Intento mantenerme igual que al principio, cuando las críticas no eran buenas. La gente en San Mamés entiende de fútbol y cuando he sido criticado he dado algún motivo para ello", ha reflexionado para matizar de seguido: "También he salido ovacionado, ha habido de todo".

Quedan por delante cuatro jornadas de liga, 12 puntos en juego, y Vesga pone el acento en el "buen momento" que cree que atraviesa el Athletic para reiterar la confianza del grupo en conseguir el objetivo de volver a competir en Europa cinco temporadas después. "Hemos estado siempre ahí, cierto es que la sensación del partido ante el Celta te deja tocado, porque el partido no fue bueno. Sabemos que quedaban muchos puntos y que lo rivales también tienen que jugar con la posibilidad de que fallaran", ha afirmado antes de defender el compromiso del vestuario para alcanzar como mínimo la séptima plaza: "El equipo está dando motivo a la gente de creer que queremos entrar en Europa. Tenemos todas las ganas del mundo, sales a la calle y ves que que la gente está con nosotros, ve que en los partidos salimos a muerte, a morder, y esperemos que se vea también el sábado".

El sábado espera en San Mamés el Valencia, su verdugo en la semifinal de Copa, pero Vesga no tiene sed de venganza por aquel fracaso, sino que se centra en la importancia de sumar los tres puntos. "Es un rival incómodo, difícil de meterle mano, pero somos conscientes de que estamos en una buena dinámica y de las ganas que tenemos de sumar los tres puntos", ha dicho un Vesga que entiende que Marcelino pueda no ser la primera opción de un candidato a la presidencia del Athletic, porque, en su opinión, "cada uno tiene su proyecto, decide con quién quiere contar. No podemos entrar en eso, nosotros ya hemos demostrado cuál es nuestro punto de vista y veremos qué pasará".